40 millones de unidades vendidas en todo el mundo hacen justicia al último Grand Theft Auto, un juego que salió, en su edición original, hace año y medio como broche de oro de la generación de PS3 y Xbox 360.
El juego barrió porque se lo merecía, conjugando un apartado técnico que parecía más propio de la Next-Gen con unas posibilidades de juego que llevaron la franquicia de R* un paso – o dos – más allá.
Pocos meses más tarde, GTA V se reestrenó en Xbox One y PS4, consiguiendo que más de uno, incluido Roswell, se planteara el votarlo como uno de los mejores juegos del 2014. Gráficamente dio un salto espectacular, rematando el gran trabajo que Rockstar ya había hecho para PS360. Pues bien, lo que parecía imposible, triunfar 2 veces por todo lo alto con el mismo juego, va a adquirir una esperpéntica dimensión al conseguirse una tercera cima. Y es que Grand Theft Auto V para PC, a 4K, vuelve a abrir bocas, consiguiendo algo que parece imposible sobre el papel: empujarte a comprarte 3 veces el mismo juego en menos de 2 años.
Por cierto, me consta que no soy el único que tiene sueños húmedos con una maniobra de calibre similar para esa Obra Maestra del entretenimiento llamada Red Dead Redemption.
