En pleno boom de juegos de puzzle en dos dimensiones con apartado visual actual, especialmente interesantes cuando se juegan en los cada día más potentes smartphones y tablets, los chicos de SpikySnail se estrenan en el mercado con una maravilla llamada The Splatters. Y es que no se puede hablar de este juego sin mencionar la palabra adictivo.
Y es que este juego, protagonizado por unas simpáticas y viscosas criaturas llamadas, lógicamente, Splatters, divierte como pocos. La mecánica es en principio sencilla: el objetivo es detonar unas bombas que encontramos en los escenarios, y para ello los Splatters no necesitan más armamento que ellos mismos. Sí, nuestros sonrientes y divertidos personajes no dudan en sacrificarse y convertirse en un fluido de «pintura» con tal de ayudarnos a conseguir nuestros objetivos y superar los niveles.
The Splatters nos trae una interesante cantidad de niveles, divididos en tres fases cada uno, en los que tendremos que alcanzar la máxima puntuación posible mediante combos a la vez que logramos alcanzar nuestro objetivo. Y lógicamente no solo se trata de lanzar nuestros directamente Splatters contra las bombas. Contamos con un gran repertorio de trucos tales como ir hacia atrás en el tiempo o hacer un doble salto. Todo esto en un magnífico apartado visual en 2D y con unas físicas bastante convincentes que de hecho son la base del juego.
Aunque la mecánica suene simple, la dificultad de Splatters varía constantemente y hace que de vez en cuando algo que a priori es fácil nos suponga todo un reto. Está claro que no es un juego que nos vaya a dar cientos de horas ni vaya a ser referente en nuestras vidas, pero la diversión a raudales hace que cualquier momento sea bueno para echarle un rato a este juego.
Disponible por 800 Microsoft Points en el bazar de Xbox Live, The Splatters es un juego divertido como pocos, que seguro que podría ponerse a la altura de otros grandes títulos Arcade. Si bien hay momentos en que los niveles se hacen repetitivos, el juego logra sorprendernos en varias ocasiones y hace que uno se enganche un rato con el típico «Va, un nivel más y lo dejo por ahora». Os recomiendo encarecidamente probar la demo y darle una oportunidad a un juego que estoy convencido de que divierte a cualquiera. Solo un apunte: sería interesantísimo verlo en tablets como el iPad, algo que, posiblemente, en un futuro ocurra. [75]