Ahora que estamos otra vez sumergidos en esa marea de entusiasmo de proporciones bíblicas que supone ver a Fernando Alonso victorioso con su bólido rojo, abrazándose a jeques, soportando los chistes del rey mamado y sin tener que sentir envidia del pelo, bronceado y millones de Briatore, ¿qué mejor que un nuevo vídeo con fragmentos in-game del próximo F1 2010?