Todos sabemos que cualquier hardware de videojuegos recién salido del horno suele tener sus problemillas. Exceptuando las más nostálgicas que aguantaban caídas épicas desde la estantería y seguían funcionando sin problemas, creo que ninguna de las consolas más actuales está exenta de un error u otro. Así que Vita, después de lo bochornoso de su sistema de partidas guardadas con juegos digitales, nos vemos con algo más de qué preocuparse, pantallazos azules molones de la muerte al jugar Uncharted Golden Abyss. Sólo esperemos que no se expanda como las ladillas en un pub de hombretones.