De vez en cuando viene bien desengrasar el cerebro, cansado de shooters sin carisma, RPG’s interminables o la enésima edición de tu juego deportivo favorito. Crecimos con los arcades de plataformas y no hay juegos más divertidos que estos, cuando están bien realizados. Ms. Splosion Man es uno de ellos.
El nuevo personaje sigue siendo tan carismático como su predecesor en Splosion Man. Es un manojo de nervios explosivo que no capaz de estar quieta un segundo. Una vez más, esa relación amor-odio con el personaje desde el primer momento que ya mostró Twisted Pixel que te divertirá con sus locuras y te pondrá de los nervios cuando lleves 30 veces intentando el mismo nivel.
Podrás explosionarte hasta 3 veces seguidas sin necesitar tocar el suelo. Si quieres recargarte, tendrás que tocar tierra en algún momento para seguir impulsando tu personaje. Con este mecanismo de triple salto y onda expansiva, solventarás los obstáculos con las acrobacias habituales: dando botes en las paredes para subir alturas, volando a media altura para esquivar obstáculos y barreras eléctricas o reventando barriles. Así que el juego es esencialmente más de lo mismo, lo cual en principio podría resultar malo, como viene siendo habitual en el mundo de las secuelas.
Sin embargo y contra todo pronóstico, la secuela no solo está a la altura del original, sino que en ocasiones la supera, ya que se las ha apañado para realizar una gran mejora, gracias a un estupendo diseño de niveles, mucho más variado artística y creativamente. Todo en los 50 nuevos escenarios, está repleto de tonos rosados (incluida la protagonista, claro) y violáceos, lo que le da una estética entre kitsch–hortera-ochentera. La actitud enloquecida e histérica de la protagonista ayuda a ello.
Además, son fases enormes, hasta el punto que ahora podrás desplazar a través de raíles, saltar entre naves en movimiento, rebotar en una cama elástica, explotar barriles de combustible para volar cientos de metros por el aire y meterte dentro de un cañón para dispararte hacia la cara del jefe final, todo de manera vertiginosa y sin tocar el suelo ni una sola vez.
A pesar de ser un juego de ensayo y error en el que siempre podremos parar para analizar el terreno, el ritmo será frenético en todo momento. El crono permanece impasible (e invisible hasta el último momento), apretando nuestras clavijas para que lo hagamos lo más rápido posible y así, conseguir el fantástico tiempo con el que regodearnos ante nuestros amigos o colocarnos en las primeras posiciones de la tabla de récords mundiales. Por tanto, si bien es cierto que estaremos repitiendo saltos y combinaciones hasta la extenuación, una vez conseguido el reto, siempre dudaremos entre hacerlo de nuevo lo más rápido posible y encontrando los objetos ocultos (en forma de zapatos en esta ocasión) o continuar con el siguiente nivel.
¡Ah!… Y ahora podremos descargarnos los «fantasmas» de otros jugadores para competir contra ellos y lograr superar su tiempo en pantalla. Más leña al fuego del vicio.
De todas maneras, si estamos cansados de repetir el nivel sin éxito, se mantiene la opción de poder de avanzar al siguiente, previo aviso del juego cuando vea que no somos capaces de finalizarlo a partir de cierto número de intentos. También podremos volver al principio de un nivel o del último punto de control, inmolándonos como en el primer juego al mantener el gatillo apretado más de 3 segundos.
Volviendo al frenetismo, está más acentuado desde el primer segundo, cuando nada más comenzar el juego, y tras el experimento fallido de laboratorio que nos da vida, nos encontramos huyendo alocadamente de un gigante que tras nosotros, va destrozando todo el escenario para matarnos. Acabaremos atizándole una buena patada en el trasero durante una escena pre-renderizada que parodia cierto momento de Depredador.
Parodias de las que está repleto el juego. El sentido del humor está desde el principio y se repite cada pocos segundos. Desde el recadito al comienzo del juego por parte de Twisted Pixel a Unreal, hasta nuestro «paseo» por el juego. Así encontraremos a nuestra chica avanzando con pasos de ballet, mientras canta el «If you wanna be my Lover» de las Spice Girls, nos mostrará la coreografía del «Single Ladies» de Beyoncé cuando esté quieta. Veremos como los científicos tatarean la melodía de la serie de TV Dallas o alguna situación que recuerda a Desafío Total. Todo un juego de por si, encontrar todas las referencias musicales y cinematográficas que hay encerradas, aunque la falta de traducción del juego (que si viene con subtítulos para las escenas no jugables), no ayude a disfrutar de todas y sí a que nos perdamos alguna gracieta de la protagonista.
El modo multi-jugador nos permite interactuar, tanto online como localmente, con hasta 3 amigos a la vez. Si bien es cierto que los obstáculos utilizado son los habituales, encontraremos 50 niveles diferentes y un final alternativo si conseguimos terminarlos. Estas fases están diseñadas para disfrutarlas de manera cooperativa. Por ejemplo, cuando necesitas que un jugador explote a otro para alcanzar zonas e interruptores que de otro modo serían imposibles de activar. También podremos manejar nosotros a dos personajes a la vez con un mismo mando con la modalidad «2 Girls 1 controller». Es un tanto rebuscada, pero os invito a que la probéis, porque no te va a dejar indiferente.
En cuanto a fallos por pulir, personalmente la cámara a veces se aleja demasiado de la acción. Bien es cierto que siempre busca el ángulo más propicio para facilitarnos la acrobacia que vamos a realizar para pasar la fase, pero también es cierto que a veces. no te enteras donde está el personaje dada la velocidad a la que ocurre todo, y eso que jugué en una pantalla de40 pulgadas. No quiero ni imaginar lo que puede ocurrir si estás jugando en una de menor tamaño.
Esto también ocurre debido a lo colorista de los niveles. Como he comentado antes el trabajo es espectacular, pero en ocasiones la paleta de colores se funde con la del propio personaje, y si lo mezclamos con el tema de la cámara, hace que a veces sea todo un poco más complicado de lo que ya es de por si. También he notado alguna ralentización cuando hay más objetos en pantalla, pero no llega a molestar.
A parte de estos pequeños «peros», los menús me han resultado un tanto confusos, tanto en manejo como en disposición y a veces los tiempos de carga entre niveles se hace un poco pesados… niveles que en sus fases finales son extremadamente difíciles, hasta el punto de desquiciarte.
Los dos primeros niveles del juego completos
Para concluir, Ms. Splosion Man es un claro ejemplo de los modernos plataformas 2D que estamos encontrando en estos últimos años. Una continuación de su antecesor si, pero con humor a raudales, ritmo endiablado y una buena curva de dificultad con obstáculos y puzzles complejos. Todo embutido en un fantástico diseño con muchos niveles y un precio razonable (800 MSP).
Puede ser frustrante. Muy frustrante en ocasiones, pero es la esencia clásica de estos juegos, va en su ADN: ensayo y error hasta que te duelan las neuronas. Como en los juegos de Mario o Sonic, o los más modernos Super Meat Boy o Trials HD: desafío y sensación de recompensa. Si la consigues, solo podrás darle a continuar para intentar el siguiente nivel mientras clamas al cielo para que la señorita explosiva haga una nueva monería o alguien le cierre la boca (…o ambas cosas a la vez). [8]
A mi el primero me desespero un cojon, eso unido al porculo que da mi cuñá con el juego y las veces que me llama paquete cuando jugamos coop… ha causado que le coja hasta tirria (a los dos) XXD
No me extraña nada, pero vamos, si te pareció cansino el primero, este segundo es doble ración, sobre todo al final. Se alguna que va a disfrutar como una enana… (En serio, es tan bueno y tan exigente como el primero).