Posiblemente también lo haya hecho el Euribor y cualquier otro producto de primera necesidad, porque sí, hamijos, Michael Pachter ha vuelto a abrir la boca. Y por una vez, y sin que sirva de precedente, suscribo todos y cada una de las palabras que ha dicho en una entrevista con Industry Gamers.
Las razones para pensar en sendos cambios son mucho. En el caso de la DS, su ciclo vital y el empuje de dispositivos como el iPod Touch e iPhone. En el caso de Wii, el apoyo de ciertas editoras que empieza a flojear y el aumento de las ventas de la competencia. Sin olvidarnos de la salida de tono de Iwata que se apresuró a decir que se habían malinterpretado sus comentarios sobre una nueva DS que tendría «gráficos altamente detallados y tendría un sensor con la capacidad de leer los movimientos de la gente que la está usando».
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