Actualmente vivimos una época donde muchos géneros y juegos emblemáticos han regresado a la vida gracias a la retrocompatibilidad, las remasterizaciones y/o remakes. Algunos no funcionan, pero otros sí, como es el caso de TMNT: Shredder’s Revenge.
Viaje al pasado
La Super Nintendo es la consola que más recuerdos de juventud me trae y TMNT: Shredder’s Revenge fue capaz de regresar a aquellas épocas. Las horas invertidas tratando de superar el reto que representaba nunca se han ido de mi mente.
Este título tiene muchos de esos elementos interesantes, pero incluso más, porque Tribute Games ha sabido darle un poco de modernidad a un juego clásico. Nuevos personajes y un poco más de libertad son algunos de los elementos que le dan frescura a esta entrega.
Mucho de donde escoger
En TMNT: Shredder’s Revenge tenemos la posibilidad de jugar con Leonardo, Donatello, Rafael y Miguel Angel, pero a ellos se unen April O’Neil, Splinter y Casey Jones, armando así un roster muy interesante.
Lo mejor de todo es que hasta seis de esos personajes pueden aparecer en pantalla al tiempo, si es que decidimos darle una oportunidad al juego en compañía, ya sea de forma local o en línea.
No siempre más es mejor, y la verdad, cuatro sería el número ideal, porque seis personajes en pantalla, teniendo en cuenta los escenarios y la cantidad de enemigos, hacen que todo se vuelva muy caótico.
Más de lo que esperaba
En mi cabeza se mantiene el recuerdo de Turtles in Time y esperaba encontrarme algo similar. En jugabilidad capaz que sí, porque estamos frente a un beat em up clásico, claro que un poco más ágil, con la opción de esquivar y hacer movimientos que hacen las veces de counter.
Adicional a eso tenemos habilidades especiales que se van recargando, objectos ocultos en el escenario, retos (algunos muy exigentes, como superar el nivel sin recibir golpes), pero lo que más me sorprendió fue todo lo que abarca dentro del lore.
TMNT: Shredder’s Revenge nos presenta una variedad de personajes, enemigos, escenarios, que la verdad no tenía ni idea que existían. Fue toda una sorpresa encontrarme jefe tras jefe y quedar con la incertidumbre de quién era o donde lo vi. Si, recordaba algunos, pero no sabía que eran tantos.
En la dificultad está el placer
El poder disfrutar TMNT: Shredder’s Revenge de la mejor manera depende mucho de la dificultad. Los primeros niveles hacen que todo sea muy sencillo y creo que le quitan mucho brillo, los más altos hacen que todo sea más complicado, pero más disfrutable, sobre todo cuando se supera un reto.
Claro que el placer también está en la posibilidad de rejugar, mejor aun si es con diferentes personajes, ya que es posible aumentarles el nivel, adquirir nuevas habilidades, superar los ya mencionados retos o incluso descubrir los objetos ocultos.
Probablemente 16 niveles suena a poco, pero la verdad es que la rejugabilidad es alta y en el nivel más alto de dificultad, no es poco el tiempo necesario para completar los niveles.
Un par de cosas negativas
TMNT: Shredder’s Revenge no es un juego perfecto. Algo que no disfruté mucho es el apartado sonoro. Algunos niveles tienen de fondo unos temas de rap algo sosos, haciendo alusión a los personajes o situaciones, que no eran nada llamativos.
Lo otro es la linealidad de los niveles. Incluso me atrevo a decir que la desigualdad en cuanto a duración de los mismos. Algunos son extensos, otros no tantos y eso no aporta mucho al momento de encontrar los objetos ocultos, porque todo se remite a destruir todo lo que nos encontremos.
Conclusión
TMNT: Shredder’s Revenge es un juego sumamente disfrutable, que sabe mantener la esencia del pasado, agregando elementos actuales como los objetos ocultos, los retos y el mejorar el nivel y habilidades de los personajes.
La duración puede ser corta teniendo en cuenta la dificultad seleccionada, pero se compensa con la rejugabilidad. La linealidad de los niveles y algunos temas musicales son de los pocos peros que le puedo poner.
Sin embargo, son muchas más las cosas buenas. Es una forma interesante de resucitar un clásico, añadiendo elementos actuales, sin restarle elementos que lo hicieron divertido en su momento. Muy recomendado.[80]