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Análisis Dissidia: Final Fantasy para PSP




Nota:No soy ni por asomo un experto en Final Fantasy. Me he limitado a comentar las sensaciones que el juego me ha producido, desde mi prisma de jugador de videojuegos, no desde el de erudito de la serie de Square-Enix.

Dissidia: Final Fantasy es un Final Fantasy atípico. O al menos lo era antes de los spin offs y demás explotaciones varias que ha sufrido a lo largo de los últimos años la franquicia estrella de Square-Enix. Así, Dissidia es un juego de lucha en 3D en el que los protagonistas y Jefes Finales de la gran mayoría de Final Fantasys se dan de hostias para determinar quién va a controlar el Universo: Si el Bien o el Mal.

Este título recuerda por su fórmula y puesta en escena a los Dragon Ball, aunque también tiene toques de Super Smash Bros. Al principio el control se hace extraño, debido al sistema utilizado, pero a los pocas peleas seguro que te haces con él. Y te enganchas. Porque Dissidia: Final Fantasy es, por encima de todo, muy adictivo.


Los escenarios, totalmente 3D, tienen un tamaño considerable, lo que ha provocado que el nivel de detalle no sea precisamente reseñable. Eso sí, se dejan tocar, tanto a la hora de ser modificados a base de ataques como al contar con diferentes elementos interactivos, como rampas, plataformas, etc. Al principio uno tiene la sensación que será incapaz de navegar con garantías por los niveles, pero con un poco de práctica le cogeréis el truco fácilmente.

El epicentro del juego de Square Enix es el Modo Historia, en el que, asumiendo la identidad de alguno de los numerosos personajes del juego, deberemos superar cuantos niveles se nos pongan por delante. Niveles que estarán planteados como si fueran tableros de un juego de mesa y en los que encontraremos enemigos de diferente fortaleza. En ocasiones será nuestra decisión a qué enemigos atacar y cuáles evitar, por lo que entrará en juego la estrategia. Entre fase y fase, muchos diálogos, cinemáticas y demás. Por algo es un Final Fantasy, y aunque sea de lucha, la historia juega un papel muy importante en todo el asunto.


El elenco protagonista.

Dissidia: Final Fantasy cuenta con una infinidad – literalmente – de elementos desbloqueables: Objetos, ataques, invocaciones, enemigos, trajes, modos, etc. Vamos, que podrás jugarlo tanto como quieras, porque con cada partida conseguirás un extra con el que la experiencia se revitalizará. Incluso puedes cambiar al sistema de combate por turnos cuando te canses de las peleas en tiempo real. Si es que te cansas, porque a pesar del quizá escaso repertorio de ataques, los combates, gracias a los aumentos de nivel, accesorios y demás ayudas para los combates no se hacen para nada pesados. Salvo cuando luchas contra un enemigo claramente inferior o superior a ti, claro.

A pesar de lo que pudiera parecer en una primera toma de contacto, Dissidia encierra un gran potencial para mantener a uno entretenido durante muchísimas horas. Si te gusta el universo de Final Fantasy, con este título vas a disfrutar de lo lindo. Vale, no es un remake de Final Fantasy VII pero también salen Cloud y Sephirot. Algo es algo.

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