Si las sensaciones que dejó Bioshock Infinite: Panteón Marino Episodio 1 fueron magníficas, su segunda parte no se queda atrás, de hecho yo la calificaría como el colofón final a toda la saga. Es el epílogo que no te puedes perder, el broche de oro de Irrational Games.
Si Panteón Marino Episodio 1 se centró más en los personajes de Bioshock Infinite y su relación con la ciudad distópica de Andrew Ryan, Rapture, esta segunda parte se centrará en los acontecimientos que rodearon la caída de Rapture, antes, durante y después de lo narrado en el primer Bioshock. Es para mí un cierre genial de la saga, es el trocito que queda para cerrar el círculo o más bien el trazo que completa el símbolo del infinito (∞).
No hablaré de la trama porque prefiero que la viváis vosotros mismos. Si os hicisteis un lío con los finales de Bioshock, Bioshock 2 y sobre todo con Bioshock Infinite, entonces vais a necesitar un paracetamol antes de jugar a este título. No estaría de más refrescar un poco los acontecimientos de los anteriores juegos de la saga aunque el DLC cuenta con un vídeo que resume muy por encima algunos sucesos importantes acontecidos anteriormente. También debo recordar que al igual que Panteón Marino Episodio 1, esta segunda parte se encuentra en inglés subtitulada al español.
Los ‘hermanos’ Lutece aparecerán de nuevo para liar aún más las cosas
En cuanto a la jugabilidad, cuando se supo que en esta entrega íbamos a controlar a Elizabeth, pensé con recelo “¿Un Bioshock sin disparos?”, pero nada más lejos de la realidad, de hecho creo que este DLC es el que mejor capta la esencia de exploración que tan bien han implementado la gente de Irrational. Es cierto que Elisabeth está bastante limitada en cuanto armamento y munición pero lo suple con un nuevo plásmido que convierte el juego en una especie de Dishonored (o el título de sigilo que prefieras). Esta nueva habilidad le permite tanto hacerse invisible, como ver a los enemigos y otros objetos clave a través de las paredes.
En cuanto al nuevo armamento tendremos a nuestra disposición una arma nueva, la ballesta, con tres modalidades de munición. En total manejaremos 6 armas distintas con munición muy escasa y 4 plásmidos de los cuales sólo uno es novedad. A todas estas novedades hay que añadir la última, que es la inclusión de un minijuego a la hora de abrir los candados con las ganzúas, tarea que antes hacía automáticamente al ser Elizabeth controlada por la IA y que ahora tendremos que realizar nosotros.
La ballesta será nuestra gran aliada para no llamar la atención
¿Y cuánto dura el DLC? Pues bien, si te lo tomas con calma como yo e intentas recoger todas la mejoras, voxáfonos, etc puede sobrepasar las 4 horas. A mi me han cundido de sobra y recomiendo encarecidamente la adquisición de tamaña obra maestra. Disfrutad con el diseño de niveles, que como siempre, es magnífico, un referente en el que deberían fijarse el resto de compañías.
Poco más hay que añadir, la banda sonora otra vez vuelve a ser increíble, recordemos que Bioshock Infonite ha sido recientemente galardonado con el BAFTA a la mejor música original. No me puedo despedir sin recomendar que escuchéis (de nuevo) la canción que acompañan los primeros compases en este DLC, una elección muy acertada, La Vie En Rose de Edith Piaf. [85]
