Icono del sitio Akihabara Blues

Assassin’s Creed Origins: el Regalo de los Dioses

Assassin's Creed® Origins

No. No es el título que le he otorgado yo a esta entrega de la saga llevada por la emoción de lo muchísimo que la estoy disfrutando. El Regalo de los Dioses es el nombre de la nueva misión secundaria disponible desde ayer mismo para Assassin’s Creed Origins.

¿Qué tiene de especial? Pues que como ya pudimos intuir hace unos días con un gif de adelanto cortesía de Ubisoft, se trata de la misión crossover con Final Fantasy XV. Como ya sucediera en su día con el título de Square Enix en El Festival del Assassin, en el que nuestros chocobros favoritos se pasearon por Lestallum con atuendos egipcios hoja oculta en mano, ambos juegos vuelven a encontrarse de nuevo. Pero en esta ocasión será Bayek de Siwa el que reciba un regalo de otro mundo.

El asteroide misterioso

Para conseguirlo, debéis viajar al punto de inicio de misión y una vez allí, seguir las indicaciones. El nivel recomendado es 23, pero dadas las características de esta misión (en la que no os enfrentaréis a ningún enemigo) podréis llevarla a cabo en cualquier momento del juego. La única dificultad será un pequeño «acertijo» (bastante absurdo en mi opinión) relacionado con un reloj de sol.

El reloj de sol

A partir de ahí, solamente tendréis que ir siguiendo las instrucciones propias de la misión y adentraros en una nueva tumba en la que, por desgracia, apenas tendréis que explorar.

Y tras la puerta número 1 tenemos…

Tras una breve escena conseguiremos tres nuevos objetos legendarios para nuestra colección: espada, escudo y una singular montura. La espada y el escudo tienen buenos parámetros, y aunque es más que probable que a esta alturas del juego ya tengáis un equipamiento mejor, resulta curioso verlos en acción en un mundo tan diferente al de FFXV.

Alguien le ha robado la espada a Noctis…


… y el escudo a Gladio.

El chocomello no termina de convencerme.

Y hasta aquí mis sensaciones con El Regalo de los Dioses. Sobra decir que, pese a contar con una sorpresita, la misión es muy simplona y sin duda se queda muy lejos de El Festival del Assassin. Aún así y a pesar de algunas voces críticas (como siempre) me parece algo muy curioso y me declaro fan de estos guiños entre juegos. ¿Y vosotros, qué opináis de estos crossover?

Salir de la versión móvil