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«Binary Domain puede ser el primer sleeper del 2012» [Impresiones para Xbox 360]



Estas impresiones han sido posibles gracias a la unidad Xbox 360 debug que Microsoft nos ha cedido y al disco de preview de Binary Domain que Sega nos ha enviado. Muchísimas gracias a las dos.

Las campañas de publicidad de los videojuegos tienen el objetivo de crear hype. En el caso de Binary Domain he de reconocer que en ningún momento me llegué a sentir atraido por el juego, al menos hasta que he tenido la oportunidad de jugarlo. Su mezcla de Gears of War con un toque de Final Fantasy me ha atrapado, y me he tenido que obligar para dejar de jugarlo. Exactamente lo mismo que me pasó con Catherine, pero en esta ocasión me ha extrañado más, porque Binary Domain cojea del mismo pie Darksiders: no ofrece nada nuevo pero ha recogido lo mejor de cada casa y ha intentado implementarlo de la mejor forma posible, con suerte desigual, eso sí. Esas fases de conducción…

Lo primero que llama la atención es su apartado gráfico: cuidado, robusto, con un motor gráfico muy potente y repleto de detalles. Tiene un gran nivel, equivalente casi al standard de calidad de Platinum Games en su etapa en Sega. Destaca el motor de colisiones de los enemigos, un motor que permite cosas como desmembrar a los robots y obligarles a arrastrarse por el suelo para desplazarse, o decapitarles de una ráfaga y provocar que empiecen a disparar a diestro y siniestro sin criterio. Hay también un toque muy de juego de rol nipón que no se puede aguantar, empezando por el diseño de los menús, muy de Final Fantasy. Y eso me ha dado muy buen rollo.

En Binary Domain hay toques de juego de rol, como la relación entre los personajes, que variará dependiendo de las respuestas que seleccionemos durante las conversas o cómo nos comportemos con ellos (fuego amigo, etc.) Hay que tener en cuenta que en las misiones podremos seleccionar un tridente compuesto por diferentes personajes, por lo que el mismo hecho de configurar el equipo posibilitará el escenario en el que posteriormente podremos afectar al resto de los personajes. Las conversaciones con el resto de personajes se pueden realizar mediante un menú contextual o utilizando el headset, con nuestra propia voz. A pesar de que no hay puntos de experiencia implícitos, a medida que vayas liquidando enemigos irás consiguiendo créditos que se acumularán en tu tarjeta VISA virtual. Una tarjeta que podrás utilizar en cajeros de armamento para mejorar las armas de tu equipo, comprar nuevas o, incluso, potenciar las habilidades de los personajes. Aparte, podrás recoger modificadores genéticos que, colocándolos en la plantilla de modificadores de cada personaje, aumentarán cosas como la resistencia, la energía, etc. Hay que destacar la gran variedad de armamento, muy moderno y contundente, que te mantendrá alerta en la búsqueda de nuevas armas. Una variedad que, por desgracia, parece no extenderse en lo que respecta a tipos enemigos, bastante repetitivos, por lo menos hasta donde llevo visto.

Binary Domain, a falta de jugarlo en profundidad, apunta a primer sleeper de 2012. Acción sin descanso, toques de RPG y un diseño de muchos kilates son algunos de los atributos de un título que me ha sorprendido porque no esperaba nada de él. Lo peor parece ser el doblaje en castellano, un doblaje que sólo he podido escuchar en los trailers dado que he jugado a la beta en inglés – por cierto, a las voces en yankee no se les puede poner ni una pega, hasta el personaje inglés tiene acento de James Bond. A la venta el 28 de febrero en toda España, al menos en los comercios que respeten la fecha de lanzamiento. Por si acaso, pásate por tu tienda favorita una semana antes. Binary Domain lo vale.

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