Ay, Tunic de mis amores, que cerca estuve de darte ese 100 que solo doy al juego que más me ha impresionado por algún motivo especial. Pero bueno, eso es agua pasada: aquí toca votar a los mejores juegos del año, así que sin duda, no puedo dejar fuera de los candidatos a GOTY 2022 a Tunic. Sin lugar a dudas, una absoluta maravilla a todos los niveles y juego del año.
El placer de investigar; la magia de la nostalgia
Tunic rezuma por todos los poros ese sabor a nostalgia, pero con todo lo que hace que la nostalgia pueda existir en el presente. Todo es bueno, no hay nada que falle, no hay puntada sin hilo ni escenario, enemigo u objeto fuera de lugar. Tamaña maestría en el diseño de niveles no puede simplemente obviarse, dejando a kilometros vista lanzamientos triple A en esta carretera que es la innovación jugable y la diversión para el usuario. A veces, para innovar no hace falta reinventar absolutamente la rueda, solo tener claro que hay que hacer y fijar un objetivo usando las herramientas que necesites.
Cómo trabaja el juego con esta base es algo excepcional, creando un producto divertido y completo, pulido en todos sus aspectos y con un amor a sí mismo incontestable. Andrew Shouldice a los mandos junto a Lifeformed y Janice Kwan en los instrumentos, Kevin Regamey creando el sonido y Eric Billingley dando belleza al mundo, sumandose un reducido equipo de apoyo para el apartado técnico y otro para el apartado sonoro, han conseguido crear un juego que recordaré durante años, sobresaliente en todo y, sobretodo, único en su especie. Si no lo habéis jugado… no se qué hacéis terminando de leerme en lugar de ir y comprar el juego para disfrutar de una de las grandes aventuras del año.