Con los calzoncillos por fuera: sobre Batman Return to Arkham

Escuché hace unos años que el segundo símbolo más conocido, después de la cruz de la religión cristiana, era el escudo de Superman. El emblemático logotipo, que luce en su pecho el hijo de Kripton, dentro de la mente colectiva de miles de millones de personas, ajenas o no al mundo de las viñetas.

Un héroe de Leyenda

Para ello el hombre más rápido que las balas ha tenido que salir de las paginas del tebeo y maravillar al publico en multitud de medios. Radio, cine o televisión han sido hogar de sus aventuras con éxitos capaces de hacer enmudecer cualquier blockbuster superheróico actual.Pero el mundo de los videojuegos nunca ha sido un lugar donde ningún personaje de DC brillara especialmente. Todos recordamos juegos como el Batman de Commodore 64 o aquel protozoo jugable donde recuperábamos la vitalidad de Kent bajando para conseguir un beso de Lois Lane, pero realmente ninguno de aquellos trabajos marcó un antes y después en su medio como si han hecho otras adaptaciones a los mismos.

Parte de la culpa fue de compañías que colocaban más dinero sobre la mesa a la hora de comprar una licencia que a la hora de hacer un producto a la altura. Ha habido excepciones, muchas de las cuales vienen a cargo de las mallas rojas y azules de nuestro vecino y amigo Spiderman, pero realmente ninguna ha marcado un camino a seguir para otros juegos de su genero. Esto cambió el día que Rocksteady lanzó al mercado el que, para un servidor, quizás sea el mayor sleeper de la historia de esta joven industria. Batman Arkham Asylum descubrió a toda una generación que las adaptaciones del cómic al videojuego podían convertirse no solo en triples A, sino en auténticos faros a los que seguir e imitar.

Rocksteady mostró el camino

Corría el año 2009 cuando el estudio cogió de la mano de Warner y hoy en día seguimos recorriéndolo junto a ellos con obras como Batman Arkham VR, experimento valiente pero no del todo acertado. Y junto a este lanzamiento podemos encontrar en las estanterías, la milésima remasterización de juegos de la generación pasada, Batman Return to Arkham. Después de lo que para muchos fue un primer contacto con la saga con el final de la historia del murciélago, Arkham Knight, Warner se lo pone más fácil para disfrutar de la noche más larga en el psiquiátrico de Arkham y de las calles Ciudad de Arkham.

Un verdadero desfile de villanos.

¿Pero realmente estamos ante una remasterización a tener en cuenta? Y no estoy hablando de una remasterizacion a no tener en cuenta unicamente para jugadores que ya disfrutaron de estas aventuras en las plataformas que los vieron nacer. Estoy poniendo en duda si un jugador que se adentre por primera vez en las puntiagudas orejas del Caballero Oscur0 debería elegir este Return to Arkham.

Antes de nada debo decir que he jugado ambos juegos en el ultimo mes, por lo que voy a hablar de la experiencia ofrecida con todas las actualizaciones que se presupone que tendrá. No hice oídos sordos en su lanzamiento a la ristra de problemas técnicos que arrastraba, ni yo ni Warner, que retrasó el titulo unos pocos meses por la odisea de criticas que recibieron después de mostrar el primer trailer ingame. Rostros poco definidos, incluso en comparación a las versiones de maquinas muy inferiores en sus capacidades técnicas, luz y color allá donde reinaba la suciedad y el aspecto tosco que daba personalidad al producto.. La polémica estaba servida.

Apaleamiento innecesario

El juego que me he encontrado con el pad en mis manos arrastra un poco de aquello que vimos en el primer trailer, pero ni en broma es tan espantoso como muchos quisieron vender. El cambio de motor a la evolución del Unreal Engine 3 ha modificado aspectos del código, es algo palpable y los primeros planos de según que rostros pueden sacar un poco de la situación. Cierto es que, a excepción de algunos rostros de Arkham Knight, ningún juego de la saga ha sido famoso por unas animaciones faciales espectaculares. Por lo tanto tampoco creo que debamos llevarnos las manos a la cabeza ante esos detalles. La saga Arkham, hablando en referencia a lo técnico, brilla por otras razones. Y es en esos detalles donde más jugo podemos sacar de esta revisión de las aventuras de Batman.

Los escenarios se ven más nítidos que nunca, llegando a parecer nativos de la presente generación en algunos casos. Perderse por las calles de Gotham o por el cementerio donde descansa eternamente Amadeus Arkham es una delicia visual que saca mucho provecho de las capacidades de la maquina. Cierto es que se sacrifica cierta oscuridad, pero para quien escribe estas lineas es un sacrificio que merece la pena.

Mejoras y extras

La velocidad se mantiene estable, sin bajones visibles en ningún momento, pero sin verdaderos alardes. El juego no funciona a 60 FPS, pero tampoco lo necesita. Esto no es un Bayonetta o un Devil May Cry. El sistema de lucha, basado en la velocidad de nuestros reflejos a la hora de actuar a consecuencia de nuestro entorno ya no se verá lastrado por esos pequeños tirones que sufría ambos juegos cuando movía muchos enemigos en pantalla que tuviesen armas que emitiesen algún efecto de luz. Pero más allá de eso, no veremos apenas mejoras en ese aspecto.

Otra de las principales novedades respecto a las versiones lanzadas en sus respectivos momentos de salida es que aquí encontraremos todo el contenido descargable hasta la fecha en cada uno de los productos. Algo anecdotico en el caso de Asylum, pero con un gran valor en Arkham City. Infinidad de trajes que harán las delicias de todo aficionado a las historias que se pueden disfrutar tanto en cómic, como televisión o cine. Detalles como pode jugar con el Batman de la serie de animación, creado por Bruce Timm, es gloria bendita para toda una generación.

Además de esto, tendremos multitud de pequeños escenarios cerrados donde probar nuestras habilidades con personajes como Nightwing o Robin, cada uno de ellos con una gran galería de trajes a su alcance, y la expansión a modo de epilogo en la que nos enfrentaremos a una despechada Harley Quinn. Quizás algún modo de juego extra o alguna misión secundaria completamente novedosa habría redondeado mucho más el producto final, pero ninguna remasterizacion nos ha ofrecido esto y pedírselo seria injusto.

Gran sonido pero sin pista yankee

En el apartado sonoro se mantiene el magnifico doblaje que tuvo originalmente, con la archiconocida voz de Claudio Serrano en el papel protagonista. Quizás una nota negativa sea que vuelven a negarte la opción del doblaje original, al menos desde el menú principal. En el juego original si cambiabas el idioma de la consola, podías encontrar el juego en completo inglés (voces y textos). Doblaje que recomiendo bastante más que el castellano, con un Mark Hamill que da vida con su voz, por undécima vez, a un Joker desquiciado. Las melodías que encontraremos de fondo en nuestras correrías en mallas se mantienen completamente intactas, con temas para el recuerdo que recogen notas de las grandes bandas sonoras que ha tenido el personaje.

¿Merece la pena hacerse con Return to Arkham?

Como en todas las remasterizaciones hay diferentes respuestas posibles. Si eres un jugador novato en la saga, es una gran forma de descubrir el por qué esta saga tiene tal cantidad de aficionados. Tiene detalles que palidecen respecto a su versión anterior, pero por contra tiene otras cosas que realmente han sido muy pulidas y cuidadas. Si ya tienes en tu estantería las antiguas versiones, no digamos ya si tienes las versiones GOTY, lo más probable es que prefieras quedarte con ellas. Las mejoras son palpables, pero quizás no tan meritorias como para volver a colocar dinero sobre la mesa.

Decisiones incomprensibles como no haber lanzado este producto un par de meses antes del lanzamiento del final de la trilogía, donde el hype por más Batman le habría hecho mucho bien, o no incluir el que para un servidor es el mejor juego de la saga (Origins), no ayudan a convencer a un comprador que ya empieza a estar azotado por la pereza ante tal numero de remasterizaciones. Todo ello acompañado por la agridulce sensación de que ha sido un desarrollo sin demasiado apoyo económico y que no termina de aprovechar del todo el potencial que tiene. El cruzado de la capa ha vuelto, pero a medias. Mejor que vuelvas a dejar los calzoncillos por debajo del pantalón, y no al revés. [70]