¿Qué es lo que caracteriza a Raikkonen? ¿Su mirada gélida? ¿Su campeonato del mundo conseguido por la torpeza de McLaren? No: que derrapa más que Carlos Sainz en una pista de aceite. Y en Mario Kart siempre, siempre, ha habido una opción que en inglés se denomina snaking y que consiste, perdón, consistía, en que tras pegar dos saltos a la vez que derrapabas, conseguías un turbo. Era un movimiento sencillo izquierda-freno-derecha-freno y salía el coche tirándose pedos como mi antiguo Ibiza.
Sin embargo, la comunidad fanboy por excelencia veía en el snaking una ilegalidad y se montaron foros de protesta cuando se publicó para DS y la gente competía online por la Wifi Connection. ¡Snakers, tramposos! ¡Tonto el que haga snaking! George Bush hace snaking, ¿quieres ser como él? En serio, era brutal. Es como si en un CoD4 la gente dijera, oh no, estáis usando granadas, eso es ilegal, no podéis tirar granadas en el juego.
El caso es que según comentan en GoNintendo, el snaking ha pasado a mejor vida como la serie de la Obregón. Algunos lo echaremos de menos; si el resto es torpe y no sabe conducir un kart no tendría por qué fastidiarnos al resto.