Via Kotaku me entero de que los responsables de Ouya, la consola basada en Android que lo está petando en Kickstarter, han anunciado que su máquina, que a mi personalmente ya me han vendido – literalmente -, va a tener un tamaño aproximado al de un cubo de Rubik.
O sea, muy, muy pequeña. Tanto que podrás transportarla sin problemas… y tu madre y tu novia no te pondrán casi pegas a que la dejes instalada en el comedor. Casi apostaría a que Yves Béhar, el responsable del exterior de la máquina, se va a convertir en uno de sus mitos sexuales…