Por fin llegó el momento que muchos esperábamos. Bethesda dio el pistoletazo de partida a este E3 2015 y que mejor manera de hacerlo que presentando al nuevo Doom en sociedad. Un juego fiel a sus raíces que me dejó un gran sabor de boca.
Por fin el nuevo Doom (que simplemente se llamará DOOM) fue presentado y debo decir que me gustó y mucho. Si, podemos decir que es un FPS más, pero lo que se pudo ver durante la presentación deja claro que ID Software ha regresado a las raíces del juego, desarrollando un juego rápido, muy bonito visualmente y sobretodo lleno de retos y emoción.
Con solo verlo en acción llegaron a mi mente los recuerdo de Unreal Tournament y Quake, llenos de esa velocidad que no da respiro y que es supremamente entretenida. Obviamente los enemigos son parte de esa ecuación y en Doom nos enfrentamos a varios demonios que no lo único que quieren es acabar con nosotros.
Otro aspecto interesante es lo visceral que es el juego. Las ejecuciones son tan espectaculares como sangrientas, pero sobretodo no interrumpen el ritmo vertiginoso que el juego presenta. A mi parecer lograron implementar muy bien las nuevas mecánicas con la ya clásica jugabilidad de la serie.
De la campaña se habló poco, sin embargo se presentó un trailer mostrando el sistema multijugador, sumamente importante en este tipo de juegos y que promete ser la base sobre la cual espera sostenerse esta nueva entrega. Más aún si hablamos del sistema Snapmap, el cual nos permitirá crear mapas y modos de juego que se podrán compartir con todos los jugadores sin importar la consola, es algo así como Doom conoce a Little Big Planet.
El juego llegará a Xbox One, Playstation 4 y PC en primavera de 2016.