Ahora que Microsoft se ha vuelto mainstream y ya no incorporará en Xbox One avances tan importantes para la Industria como la obligación de conectarte a Internet cada 24 horas, se ha destapado la Caja de Pandora.
Ha sido un trabajador despechado, decepcionado con MS por haberse bajado los pantalones haber hecho números y haberse dado cuenta que no iba a vender su venidera consola a nadie excepto a Jentrena, el que ha desvelado lo que parece hasta una broma: que eso de compartir los juegos con 10 familiares/colegas era mentira.
La consola con peores intenciones de la Historia.
Y digo mentira porque la compartición, por llamarla de alguna forma, estaba limitada a partidas de 15 minutos a una hora, y hasta se estaba estudiando la opción de limitar el número de partidas que un jugador podría echar a un juego al que tuviera acceso mediante este sistema. Muy lamentable todo. Microsoft se ha cubierto de gloria con una campaña de desinformación que ha culminado con un «Donde dije digo digo Diego» que da menos seguridad que el portero de Thaití.
Para acabarlo de rematar, el colega se atreve a criticar el sistema de compartir los juegos en PS3/Vita. En fin, que en este mundo supongo que tiene haber de todo.
Gracias, kr3at0r.