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FIFA 13

Parece que vamos a desatar una nueva guerra en AKB y es que si ya la liamos parda con PES 2013 entre Kristian, Juantxi y el menda lerenda, FIFA 13 no se iba a ir de rositas y también le hemos dado una triple ración de impresiones por culpa de su demo… y ya os voy adelantando, como digo en el título del artículo, que FIFA 13 no es para tanto.

Antes de nada he de decir que casi no he jugado a las entregas anteriores del FIFA, quitando alguna pachanga con los amigos en alguna quedada o en las previas y los descansos de la pasada Eurocopa con FIFA 12 y la verdad es que este último me dejo mejores sensaciones que esta demo, aunque como os digo, no jugué demasiados partidos como para llevarme una impresión real del título del año pasado.

Por eso, no voy a comparar el juego o más bien esta demo, con las entregas anteriores, simplemente voy a comentaros que me ha parecido. Antes de nada quiero que tengáis en cuenta una cosa y es que, como ya sabéis, soy bastante aficionado al PES y me he mantenido fiel a esa saga desde PES 4, así que podéis tomar mi punto de vista como el de un aficionado que hace mucho que no juega a FIFA, un nuevo usuario o un amante del PES y comparar el texto con los de Kristian o Juantxi para así haceros una idea más global de que demonios esperaros del juego. Una vez dicho esto, comenzamos.

La demo de FIFA 13 me ha decepcionado bastante, así de claro. Tras escuchar miles de veces que la saga de fútbol de EA se va a comer una vez más al PES y dado que los pocos partidos a los que jugué a FIFA 12 me gustaron bastante me decidí a probar la demo de este año.

Vamos a ir paso a paso, no es que FIFA 13 sea un mal juego de fútbol, me ha parecido divertido y se ve realmente bien, incluso tengo envidia sana de la fluidez con la que se realizan las transiciones entre los regates, los controles seguidos de los tiros y todas esas vicisitudes en las que PES se sonroja airadamente, pero hay varias cosas que no me han gustado del juego.

La primera el ritmo alocado de los partidos, completamente irreal, dando incluso la sensación de que los campos son muy pequeños. No sé lo que tardaríamos en llegar de un área a otra haciendo un sprint pero estoy seguro de que es una cantidad de tiempo nada acorde a la realidad, pareciendo incluso que los campos son demasiado pequeños. No tendremos ni un momento para el respiro, es como si hubiéramos pulsado el botón de avance rápido de un reproductor de vídeo y viéramos un partido a cámara rápida. Eso sí, este ritmo vertiginoso gustará a muchos jugadores y tiene la ventaja de que siempre ocurre algo, un regate, una falta, una ocasión de gol…

Otra de las cosas que no me han gustado nada es el sistema defensivo del juego. Creo que FIFA 13 favorece demasiado al atacante, sobre todo cuando lo estamos sufriendo nosotros, careciendo nuestra IA de rigor defensivo. Tampoco me resulta nada fácil defender con el jugador que yo estoy controlando, pero eso puede deberse a mi falta de experiencia con la saga, así que no puedo entrar a dar la opinión en este tema, pero sí puedo deciros que la defensa es, o así me lo ha parecido, demasiado blanda. La IA rival defiende mejor, aunque creo que deja muchos espacios libres, no se ordena demasiado bien y le falta algo de intensidad en la presión.

Algo positivo de este aspecto defensivo (no todas iban a ser malas noticias) son los porteros, que tienen unas animaciones estupendas y realizan auténticos paradones dignos de cancerberos del más alto nivel. Además el saque, tanto con la mano como con el pie, está realmente bien implementado, nada de mandar siempre balones bombeados como ocurre en PES y eso está verdaderamente bien.

En cuanto al ataque, la verdad es que no tengo demasiadas quejas, quitando el comportamiento del balón que a veces me resulta algo extraño, sobre todo en el juego aéreo. Si PES, por ejemplo, a veces peca de que el balón parezca una piedra FIFA es todo lo contrario y en ocasiones hace unos efectos tan raros por el aire que parece que sea un balón de goma de esos que comprábamos hace no tanto en las tiendas de todo a cien.

Por lo demás las animaciones tan fluidas hacen que los controles, regates y remates resulten realmente atractivos a la vista y además nuestros compañeros de equipo siempre se ofrecerán para que les hagamos un pase, realizando desmarques o apoyos bastante bien gestionados, aunque de esto tiene también parte de culpa la IA algo blanda que os comentaba antes.

Respecto al acabado técnico es evidente que FIFA 13 se gasta un buen motor gráfico, por eso, no soy capaz de comprender la ausencia total de animaciones en las caras de los jugadores, cuando en el resto de los movimientos se comportan de una manera excelente.

Caso aparte merece el motor de colisiones del juego, que a veces resulta del todo irreal y absurdo, chocándose algunos jugadores como auténticos ineptos o, en algunas ocasiones, cayéndose al suelo con un ligero toque del contrario, esto puede cambiar bastante en la versión final del juego, pues el año pasado también hubo bastantes problemas con las colisiones en la demo que finalmente fueron solventados en el juego final. Además, en los balones divididos o rechazados, sospechosamente siempre tiene ventaja la IA rival, sobre todo en los balones de ataque.

Así pues, visto lo visto, FIFA 13 no es para tanto. Me esperaba mucho más del juego de EA, que en sus anteriores entregas, pese a jugar solo algunos partidos sueltos, me había parecido un juego de fútbol de aúpa. Tras jugar a la demo mis conclusiones son que pese a que se trata de un juego de fútbol bastante divertido le afecta en sobremanera el ritmo acelerado que han decidido transmitirle a los partidos, quitándole buena parte de su realismo y dándole un aire bastante arcade al juego. Es toda una pena, porque la fluidez de las animaciones, los desmarques de nuestros compañeros o las paradas de nuestros porteros son dignas de admiración, así que, sintiéndolo mucho, Kristian, me temo que EA ha querido que con FIFA 13 sí que haya juego de tronos.

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