Templado. No voy a decir que me he quedado frío tras la Conferencia de Sony pre-GamesCom 2011 pero lo que sí que puedo asegurar es que no he salido de allí dando saltos de alegría ni nada similar. Quizá son los años, pero yo necesito marcha para emocionarme. Y cuando el negocio cada vez va de «más de lo mismo», la verdad, me cuesta encontrar alicientes.
Una conferencia de una compañía como Sony siempre levanta expectación, y más en el marco de un evento de la importancia de la GamesCom 2011, la feria europea de videojuegos con más visibilidad y calado. Aunque uno siempre espera que las empresas se lancen a la piscina y confirmen mil y una novedades, lo cierto es que la compañía nipona, al igual que EA horas antes, ha jugado sobre seguro, sin riesgos, pero también sin grandes alegrías para una comunidad que todavía tiene demasiado presente los problemas con PSNetwork.
Y es que la gente de Sonyse ha limitado a repasar la actualidad y los lanzamientos más importantes que están por salir, sin producirse ningún anuncio realmente sorpresivo. Una conferencia muy medida pero que, como viene siendo habitual en estos saraos desde que la Wii irrumpió en el mercado, ha mirado demasiado de reojo al mercado casual, algo que la aleja de los que buscamos experiencias y anuncios mucho más explosivos e intimidatorios.
El tema precios ha sido otro de los protagonistas de la conferencia. Un nuevo modelo de PSP, de aspecto similar a la infame PSP Go pero con lector de UMDs, que costará 99 € y la ¿Rebaja? de la PS3 a 249 € no me han dicho nada, la verdad. Pero lo que sí que me ha puesto cachondo ha sido el anuncio del lanzamiento de una pantalla 3D de 24″ + 2 gafas 3D por menos de 500 €. Una gran forma de promover las tresdé en los hogares.
Por cierto, del Move mejor no hablo. Promocionarlo con juegos de gimnasia o de baile, y más en un evento como la GamesCom, me parece totalmente contraproducente. Por usar un eufemismo.