Tras el anuncio del precio y fecha ¿definitivos? del lanzamiento de PlayStation 3, más de uno está replanteándose seriamente su idea inicial de comprarse el mismo día de lanzamiento la consola de Sony y hacerse mientras con Xbox 360. Yo incluído.
No son pocos los Sonyers que, tras resistir la tentación de comprarse en un momento la nueva consola de Microsoft, empiezan a ver a Xbox 360 como una opción a tener en cuenta. La similar potencia de ambas máquinas hace que aspectos como el ajustado precio de la nueva Xbox y el que ésta ya esté disponible en las tiendas la convierte en un plato muy apetecible para los fans de PlayStation más impacientes. El escenario tan deseado por Microsoft, y en el que la compañía de Windows tiene margen para actuar. Algo nuevo para ellos después de ir a remolque de PS2 en la pasada generación de consolas.
Pero ¿realmente Microsoft está haciendo todo lo que puede para quedarse con el mercado? Da la impresión que no. El catálogo actual de Xbox 360 está sustentado principalmente por dos juegazos como son Oblivion y Ghost Recon 3, pero que tienen el handicap de no ser exclusivos. Lo que quiere decir que quieran disfrutar de ellos no están obligados a comprarse la 360, si cuentan con un PC potente. Los ases de la baraja de Sony, en cambio, sí que lo son: Metal Gear Solid 4, Final Fantasy XIII, el prometedor Kill Zone 2, Devil May Cry 4, etc. Eso sí, todos ellos de momento en el aire, pues aún queda para que los veamos en las tiendas. Para contrarrestar a éstos futuros números en ventaría, en la parrilla de lanzamiento de Xbox 360 para los próximos meses encontramos a uno de los juegos más espectaculares y que más expectativas ha levantado en los últimos E3: Gears of War.
Y por supuesto está Halo 3. Un juego- «El Juego» – que puede convertirse en el auténtico vende-360 que necesita Microsft, ha sido anunciado finalmente para el 2007, lo que ha supuesto una ducha de agua fría para los que esperaban que la compañía de Bill Gates cumpliera su palabra y lo lanzara en primavera de este año para coincidir así con la fecha de lanzamiento de PlayStation 3. Pero los atrasos parece que son contagiosos, y PS3 y Halo 3 no saldrán hasta finales de año la primera y ya empezado el próximo el segundo.A falta de la tercera entrega de las aventuras de el Jefe Maestro, es de preveer alguna jugada por parte de Microsoft para noviembre de este año con el objetivo de atraer la atención de la comunidad de jugadores y desviarla – tanto como sea posible – de PlayStation 3. Teniendo en la recámara a Halo 3, pensar que Microsoft se está guardando un triple A de primerísimo nivel para el último momento parece un poco pretencioso. Las quinielas apuntan más bien a una bajada considerable de precio, mediante la cuál conseguirán matar dos pájaros de un tiro: robarle ventas a PS3 y acercarse al hipotético y competitivo precio que muchos analistas auguran para Wii, la nueva consola de Nintendo.
¿Y la jugada de Sony? Dos packs, uno a 500 euros y el otro 600, que saldrían a la venta el 17 de noviembre de este año. Baratos no son. O serán. Las diferencias entre los dos modelos – unido al hecho de que el inferior no podrá actualizarse al completo – hace que el adquirir la versión de 500 euros sea como conformarse con un segundo plato. Y es que no son moco de pavo, a pesar de que algunos medios generalistas se obstinen, ya sea por ignorancia o por intereses ocultos. A saber: el modelo «barato» no incluye salida de alta definición, con lo cuál los jugadores no podrán disfrutar en sus pantallas planas del espectáculo visual del que la máquina de Sony Será capaz. Tampoco incluye la tarjeta WIFI necesaria para conectarse a Internet o para hacer uso de la compatibilidad con PSP anunciada durante este ya pasado E3. Para acabarlo de rematar, el disco duro será más pequeño en este pack, y sólo contará con 20 gigas, por las 60 del pack deluxe.
En el día de su nacimiento, PS3 se encontrará con varios handicaps con respecto a su más directa competidora. El primero, haberle dado un año menos 5 días de ventaja a Xbox 360, teniendo tiempo ésta de formar una base de jugadores y un catálogo de juegos bastante más numeroso que la previsiblemente corta parrilla de lanzamientos inicial de PS3. El segundo, su precio. Si se pusiera a la venta hoy mismo al precio anunciado, el pack más barato de Sony sería 100 euros más caro que el pack VIP de Microsoft. Y después, todas las dudas que genera el nuevo servicio online de Sony. Dudas porque éste todavía no está en funcionamiento, mientras que Xbox Live día a día gana nuevos adeptos, además del hecho que Microsoft siempre ha considerado el servicio online como la punta de la espada de la estrategia Xbox.
A igualdad de nivel de pack, esta diferencia se elevaría a 200, pero el que se hiciera con el pack «barato» de Xbox 360 contaría con dos características superiores a la PS3 de 500 euros: tarjeta de red inalámbrica y salida de alta definición para conectarse a un televisor preparado para ello. Como ya ha señalado Peter Moore, ex Sega y actualmente en Microsoft, más de un jugador preferirá comprarse una Xbox 360 y una Wii que sólo una PS3.
Por supuesto, todo ésto no son más que datos, especulaciones y opiniones personales. Al final lo que acabará decidiendo a los jugadores será su fidelidad a la marca y sobre todo, y como ya hemos dicho, los juegos. Y ahí es donde Sony puede contar con su gran baza: las franquicias. Pero poco a poco Microsoft le va ganando terreno, quien sabe si a base de talonario o gracias a la confianza que las Third Parties le van dando progresivamente, una vez ya Microsoft se ha deshecho de la etiqueta de aventurera del sector, y que ha demostrado que cree firmemente en el mercado de los videojuegos. O igual por un poco de ambas cosas. La cuestión es que Microsoft ha arrancado el compromiso a RockStar de que el próximo GTA saldrá a la venta a la vez que en PS3.
Tras un Vice City y un San Andreas que no salieron a la venta en Xbox hasta al cabo de 1 año con respecto a la versión de PlayStation 2, la balanza se nivela. Y no es algo nuevo. Cada vez hay más multiplataformas y menos juegos exlcusivos, que son los que realmente hacen vender consolas. Las compañías como Microsoft parecen más interesadas en hacerse con los juegos que están triunfando en la competencia que en crear nuevos títulos. Aunque con los títulos que está sacando Rare, faltos del nivel que sí mostraron en Nintendo 64, igual tienen razón, y la maniobra a seguir es hacer uso del talonario cual Abramovich enamorado del ocio electrónico.