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Microanálisis freestyle de Sam&Max: Beyond Time and Space

Old School; la verdad es que siempre que hablo de «ol’ school « me viene a la cabeza un ‘nigga’ con una super radio al hombro, chandal hortera, pantalones cagaos y musica funky. Hay gente que dice que tengo un problema yo lo llamo Pepito, mi amigo imaginario.




Si en este caso aplicamos Old School a los videojuegos, me vienen a la cabeza compañías como LucasArts, Infogrames, Atari, Origin, ésto… Sí, bueno, muchas cosas, recuerdo mi acné jugando al pacman por mí y también recuerdo lo que disfrute con las grandes aventuras graficas de mi juventud, Monkey Island, Broken Sword, Wing Commander! y muchos otros títulos que probablemente me dejo en el tintero y que por lo tanto, se llenaran de tinta.

En este caso Sam&Max: Beyond Time and Space intenta eso, coger el ‘loro’ y poner a los kool&the Gang a todo trapo, mientras baja al ‘hood’ a echar unas canastas con sus ‘bros’ y la verdad, casi me engaña.

Por los 800 puntos que vale… Me compro dos perros y un loro para mi avatar.

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