El enfrentamiento entre el equipo norteamericano Cloud 9 (C9) y el equipo coreano de Samsung Blue (SSB) ha sido probablemente uno de los mejores de este Campeonato Mundial de League of Legends.
SSB se ha impuesto 3-1 a C9, lo que no quiere decir que hayan ganado con facilidad como todo el mundo esperaba. Cloud 9 supo jugar a muy buen nivel, quedándose muy cerca de forzar la quinta partida.
El equipo americano se adelantó dando un recital de juego, arrollando a los coreanos desde el primer minuto de partida hasta el último. Sneaky fue el gran protagonista, ya que logró un 14-0 con Lucian. En la segunda partida, SSB se la devolvió a C9 gracias a la gran actuación de Dade con Twisted Fate, que supo usar su muy bien su ultimate para ayudar al resto de líneas a sacar ventaja.
También destacó Deft, que demostró que no se le puede dejar pickear a Twitch bajo ningún concepto. En la tercera partida Cloud 9 aguantó como pudo las embestidas de SSB hasta que la diferencia de objetivos entre ambos equipos supuso una buena diferencia de dinero, que llevó al equipo coreano a ganar sin muchas dificultades. La última partida entre estos equipos fue la más interesante, ya que ambos equipos podían haber salido victoriosos. Cloud 9 supo jugar muy bien desde la desventaja y aprovechó muy bien un fallo del equipo coreano para tirar toda la calle de medio y las torretas del nexo. C9 se la jugó e intentó acabar con el nexo, pero cuando quedaba apenas un cuarto de vida, los jugadores de SSB hicieron respawn y acabaron con C9.
Aunque Cloud 9 ha sido derrotado, ha demostrado que los equipos coreanos no son invencibles y que aunque no suele pasar, en ciertas ocasiones cometen grandes fallos que les pueden costar la partida.