Street Fighter IV es sin duda uno de los títulos más deseados del momento. Pocos aficionados a los videojuegos no se mueren por jugar a Street Fighter IV, el que se puede considerar como el mejor homenaje posible a Street Fighter II. Y es que el juego de Capcom es un tributo a toda una generación de jugadores que, cada tarde, se dejaban los ahorros en las recreativas del barrio. Gracias, Ono-san.
Gráficamente combina un estilo manga con un acabado muy cell shading muy atrayentes. Lo mejor de todo es que se consigue actualizar la estética de Street Fighter II pero sin traicionar sus orígenes. Todo ha mejorado muchísimo pero quizá el aspecto que más llamará la atención a los que se engancharon a SFII es la tridimensionalización de los escenarios y la vida que se puede ver en ellos.
En cuanto a las cinemáticas que se encargan de narrar la historia de cada uno de los personajes, éstas están realizadas como si de un anime se tratara, con dibujos 2D son, a mi entender, deun nivel muy inferior a lo visto en el propio ingame.
A nivel jugable no se le puede poner ningún pero, a excepción quizá de que es más dificil de lo que mis dedos recordaban. Y que casi que te exige, para poder ser algo competitivo, echarle una de horas que ríete tú de los manuales de los simuladores. Conocer los movimientos especiales es un momento, pero dominarlos verdaderamente y, sobre todo, saber cuando hay que usarlos, es todo un desafío – Sólo mis dedos saben lo que me ha costado pasármelo por primera vez. Como también lo será desbloquear todos los logros del juego.
Capcom incluso se ha permitido la licencia de incluir una variación en el modo arcade según la cuál, mientras estemos conectados online, podremos ser interrumpidos por otros jugadores con el mítico mensaje de «A new challenger has come».
Si tuviera que criticar un aspecto del juego, aparte de la escasa calidad de muchas de las secuencias animadas – que no la fastuosa y artística intro, sería sin duda los remixes de algunos de los temas originales de Street Fighter. Quizá es que estoy demasiado chapado a la antigua pero las variaciones de canciones tan míticas como la del nivel de Guile me tocan la fibra sensible. Y no es porque me resista al cambio, porque hay versiones alejadas del original que me ponen los pelos como escarpias, como la siguiente en guitarra eléctrica.
Street Figher IV recupera el inconfundible sabor de los recreativos y posibilita que cualquier poseedor de 360, PS3 o PC pueda disfrutar de una auténtica y maravillosa coin op. Una compra obligada para todos los aficionados al género de la lucha. Eso sí, asumid cuanto antes que el adquirir juego implica, al menos si queréis disfrutarlo al 100%, la compra de un stick de calidad, porque jugar con el mando de la consola es como beber un buen vino en un vaso de plástico. Que eso no quiere decir que con el pad no se pueda jugar más o menos bien, pero ¿Alguien ha visto una recreativa que se controle con un PAD?