¿Sabéis qué? Cuando he leído los comentarios en la entrada de Resident Evil 5 Director’s Cut y he visto las críticas que habéis hecho, muchos de vosotros amigos que tenéis además cierta querencia hacia la consola de Sony, me he dado cuenta, nuevamente, de que algo no funciona con los mandos de control con movimiento. Y no son ellos, es su implementación absurda lo que provoca el malestar general. Si el control va a ser así, Sony no tardará en sacar su propio «nunchuk» y evitar el trauma de tener que usar un dualshock con una sola mano. Porque si lo que se pretende es la sencillez y precisión en el control, sinceramente así no se consigue.
La segunda demo que se pudo ver ayer en la conferencia de Sony en el TGS fue la de Little Big Planet, juego que sí será actualizable por software para hacerlo compatible con el nuevo mando. La implementación implica la participación de dos personas o,oooo, la de una con tres manos. Dos manos controlan al sackboy como se ha hecho toda la vida y la tercera mano, que quién tuviera el lujo de poseerla supongo que la usaría para rascarse la entrepierna, se utiliza para mover los objetos del escenario, léase plataformas, palancas, etcétera.