Nuevamente es el momento para coronar lo mejor de este que se está despidiendo, y que mejor forma de hacerlo que con The Game Awards 2015, los cuales se llevaron a cabo en la ciudad de Las Vegas. ¿Estás listo para conocer a los ganadores?.
En una ceremonia algo desordenada, se coronaron los mejores juegos de 2015 y debo decir que hubo bastantes sorpresas, pero sobre todo no se presentó un claro dominador, en unos premios que tuvieron su momento más emotivo durante el tributo al fallecido presidente de Nintendo, Satoru Iwata.
El evento comenzó con algunos premios ya entregados, como el caso del mejor juego familiar para Mario Maker y Mejor juego de luchas para Mortal Kombat X. De este mismo modo, algo informal y muy por fuera del protocolo, se entregaron los premios para Lara Croft Go y No Man’s Sky, como mejor juego para móviles y juego más esperado, respectivamente.
Ya durante la ceremonia como tal, los premios más importantes se los llevó The Witcher 3, con mejor juego del año y desarrollador del año, seguido por Metal Gear Solid V con mejor banda sonora y mejor juego de acción; situación curiosa se presentó durante la entrega de este premio, ya que el propio Geoff Keighley entregó los verdaderos motivos por los cuales Hideo Kojima no pudo recoger el premio personalmente (y si es lo piensan, son cuestiones de abogados)
Her Story fue una de las sorpresas de la noche, llevándose los premios a mejor narrativa y mejor actuación, este último entregado a Viva Seifer. Continuando con los independientes, Rocket League ganó como mejor juego en dicha categoría y Ori and the Blind Forest se llevó el premio a la mejor dirección de arte.
Otra de las sorpresas de la noche la dio Splatoon ganando el premio a mejor multijugador. Hablando de multijugador, el mejor equipo e-sport del año se lo llevaron los chicos de Optic Gaming.
Fallout 4 y Bloodborne fueron, a mi parecer, los grandes perdedores de la jornada, los cuales a pesar de la gran cantidad de nominaciones se fueron con las manos vacías, aunque eso no significa que sean malos juegos.
Más allá de los premios, desde mi óptica, el punto más flojo de estos premios fue el tema de los promocionados Estrenos Mundiales, los cuales resultaron ser avances muy cortos en casos de juegos tan esperados como Uncharted 4, Quantum Break o los dos nuevos proyectos de Telltale Games, mientras que se les dio más tiempo en pantalla a proyectos como Rock Band VR o Disney Infinity 3.0.
Me queda un sabor agridulce de una ceremonia que aun tiene cosas por mejor, y que año a año se esfuerza para continuar exaltando, no solo a la industria de los juegos de vídeo, sino a las personas que han logrado llevarla al sitio en que se encuentra actualmente, y si no que lo diga Greg Miller, ganador al jugador más influyente del año, el cual dejó este tema bastante claro durante su discurso.