Batman, los orígenes siempre son duros

Si algún personaje ha conseguido triunfar a nivel global estos últimos años, ha sido Batman. El Caballero Oscuro ha logrado objetivos no muy fáciles: primero, con las películas de Nolan ha conseguido unir a la crítica y público en torno a su figura como un punto de referencia. Y dos: RockSteady ha logrado los mejores videojuegos de superhéroes de siempre. Dos triunfos difíciles de conseguir…

y eso tiene mucho mérito. La criatura salida de la mente de Bob Kane es ahora mismo un símbolo de calidad en los dos terrenos nombrados: Warner Bros. ha decidido que este invierno vuelva a salir a las calles, pero en esta ocasión RockSteady debe de estar en otros quehaceres (Tortugas Ninja? Batman next-gen?) y han dejado que su estudio interno (Warner Bros. Games Montreal) aproveche TODO el material de estos dos últimos años para seguir haciendo caja con el Sr. Wayne. Por un lado, normal, viendo que la marca «Batman» es un valor seguro en estos tiempos y que el contenido existente no exige que los desarrolladores se rompan mucho la cabeza para mantener el nivel con un nuevo juego. Y eso han logrado, ni más ni menos: un nuevo título que si bien sabe a «ya visto» mantiene una calidad alta en todos sus apartados y que gustará a los fans del hombre murciélago. Todo ello unido a alguna novedad que otra y a la aparición de un online que es original en su planteamiento. Un valor seguro para navidades, vaya…

Cronológicamente, este Arkham Origins nos sitúa en los comienzos de Bruce Wayne como Batman, todavía no es conocido por los malhechores pero sí es ya un rumor que corre por las calles. La policía todavía no sabe de qué parte está, y además el jefe de policía es un corrupto (como la mayoría de políticos españoles, vaya) que se deja hacer por ladrones, asesinos y psicópatas que pueblan Gotham. Black Mask, Bane, el Pingüino, Enigma,…incluso el Joker, y una ingente cantidad más de enemigos se encontrará en su devenir por la ciudad mientras intenta sobrevivir a su caza y captura: «se busca a Batman vivo o muerto, se recompensará«. Con esa premisa, se produce un toque de queda que recomienda a los ciudadanos que se queden en sus casas, por lo que los criminales campan a sus anchas por la ciudad al calor de la noche. Lo que no saben es que se meten en el terreno de quien mejor aprovecha las sombras…

Arkham Origins de nuevo es un juego de acción, exploración y aventura, que aprovecha hasta el último milímetro de la mecánica ideada en las dos entregas anteriores. Aquí podremos recorrer Gotham y tener un acceso rápido desde el batwing a la zona que queramos. Encontraremos multitud de objetivos secundarios: actos delictivos en curso, recuperar las antenas saboteadas en cada zona, etc. También está presente el modo Detective, que tan buen resultado dio en los anteriores juegos. Esta vez tendremos un mecanismo que nos permitirá revisar virtualmente los asesinatos cometidos, rebobinando la acción, hasta llegar a encontrar todas las pistas que nos llevarán a resolver el caso. Este mecanismo, visualmente es muy espectacular, pero a nivel de jugabilidad nos da todo «masticado«, dejándonos sin nada que hacer a nivel de puzzle potencial. Cosméticamente es muy bonito, pero es todo demasiado guiado y prefijado.

Otro de los aciertos de la saga es la mecánica de las peleas. En esta ocasión se mantiene (como en todo el juego en general, parece que han sido fieles al lema: «si algo funciona, no lo toques«) y con los mismos resultados agradables al pad por la interactividad y la naturalidad de las animaciones con respecto a las órdenes desde el mando. Es todo muy intuitivo, encadenando combos y contraataques, además de nuevos ataques y mejoras que podemos ir desbloqueando al conseguir PE en las peleas. Refuerza la coraza antibalas, la resistencia en las peleas cuerpo a cuerpo, ataque con el batarang, golpe con planeo,… hay multitud de objetivos a lograr que nos reportarán más PE y por consiguiente podremos conseguir más movimientos (por ejemplo, ataques con la pistola-ancla para neutralizar enemigos). Todo está unido en un árbol de potenciadores muy bien resuelto. El problema es que a veces se hace pesado lograr tantos objetivos secundarios por su repetitividad. Destacar sobre todo las peleas con los final-bosses, donde aparte de los movimientos estándar también tendremos que utilizar otros que nos den ventaja, y los espectaculares QTE´s que se producen de vez en cuando durante las confrontaciones, con unas coreografías realmente conseguidas.

A nivel visual, el juego sigue cumpliendo de forma estupenda y brillante. Gotham está a nuestras órdenes y deseos, con los grandes modelados de personajes que se han hecho famosos estos últimos años, y una gran urbe a nuestros pies por donde movernos. Podremos ir a zonas donde ya hemos estado en los juegos anteriores, pero que tienen unos acabados distintos debido a la línea temporal donde se producen los hechos. WB Games Montreal no se ha roto mucho la cabeza para forzar el engine gráfico a cotas más altas que las logradas por RockSteady, y para ello se han sacado de la manga el toque de queda que la Policía de Gotham decreta, y así no tener que poner en pantalla a gran cantidad de transeúntes pululando por la gran urbe. Una buena estrategia con una causa más que justificada, pero que deja claro que no han querido arriesgar con problemas técnicos o framerates más justos con los que se podían encontrar…

La aventura es larga, aunque nos quedemos directamente con la historia estrictamente hablando (y con unos cuantos giros argumentales que le sientan muy bien al juego) pasaremos de la docena de horas de juego. Si realizamos todas las acciones secundarias podemos hablar de 16 horas de juego aproximadamente. Después se activan la Partida + o el Yo soy La Noche, donde las condiciones son durísimas para sobrevivir (valga con decir que sólo tendremos una vida), un desafío a la altura de los mejores con el pad. Con estas opciones después de la primera partida, y con el online que después describiremos, podemos decir que hay Batman para muchas horas.

La parte del modo online para 8 jugadores -programada por Splash Damage los de BRINK– es un curioso modo de juego «3 contra 3 contra 2» donde podremos formar parte de dos facciones de malhechores a las órdenes de un supervillano –Joker o Bane– (en total 6 usuarios) mientras otros 2 hacen las veces de Batman y su fiel escudero Robin. El sistema de juego enfrenta a las dos facciones contra los dos héroes, mientras éstos intentan atrapar a los enemigos. Es inteligente el uso de las dos vertientes y sobre todo es muy divertido tanto para el bando «malo» como para los que se calzan los controles de los dos héroes. Un online competitivo-cooperativo que, lejos de lo que podía parecer, acaba enganchando y es todo un soplo de aire fresco. No será un modo de juego para echar decenas de horas, pero sí es original y desde luego se agradecen estos intentos de innovar a la hora de hacer mecánicas de juego que se apartan de los shooters de toda la vida.

En definitiva, Batman Arkham Origins es un «sucedáneo caro«, un producto con una producción a la altura de los dos primeros pero con un regusto amargo a «ya visto» que le quita parte de la gracia. Se hace algo pesado realizar ciertas tareas secundarias y se han ahorrado gran cantidad de desarrollo -la mayoría, claro- reutilizando todos los mecanisnos y gadgets que las anteriores entregas. Si a eso le añadimos que el modo Detective es más profundo pero a la vez más «guiado» tampoco le ayuda mucho al juego. Desde luego no es para nada un mal juego, y a los fans de Batman les gustará seguro. Además, las peleas contra algunos de los enemigos más acérrimos de Batman están bastante bien resueltas y poder visitar la Batcueva «mola«, lo que también ayuda. Batman no defrauda, pero tampoco encandila como estos años pasados…[70]