No jugué en su momento a Mafia (Illusion Softworks (ahora 2K Czech), 2002). No me llamaba su propuesta de GTA capado, una franquicia que me tenía flipado con GTA III y con GTA Vice City, con el que compartió año de lanzamiento.
La Edición Definitiva
Ahora, con Mafia: Definitive Edition, el remake a cargo de Hangar 13, he caído. Su concepto me ha acabado gustando, aunque más por su guión que por su jugabilidad. Y es que con esta revisión he tenido sentimientos encontrados. Por una parte, su actualización visual me parece un trabajo muy decente. No me parece top, pero está bastante potable.
La ciudad en la que transcurre el juego, Lost Heaven, una interpretación de la Nueva York de los años 30 durante los últimos coletazos de la Ley Seca, es curiosa de recorrer, los efectos de luz son correctos, los vehículos de época, de esos que todavía se pueden ver por la Havana, se han recreado de una forma muy detallada y el control de los mismos es decente. Pero son los personajes los que se han beneficiado de una actualización más apreciable: atención a la textura de los trajes, las caras y sus emociones…
Las costuras
Tan solo es en los pequeños detalles, como la forma en la que los personajes colocan los pies al subir o bajar las escaleras, sin apoyar los pies en los escalones, algunas texturas en aparente baja resolución, cuando Mafia Definitive Edition deja ver las costuras, lo que evita que uno pierda la cabeza por él. En general, un gran trabajo recuperando un título que en su momento conquistó a muchos jugadores.
Pero esto contrasta enormemente con la linealidad del juego y un diseño que sabe a anticuado, con un título que aparentemente no busca sorprender jugablemente pero sí hacerse valer de un mundo abierto para crear una experiencia controlada, en contraposición a ese caos maravilloso que son los GTA, y una narrativa perfecta, protagonizada por unos personajes tremendamente carismáticos.
Armas jugables
Si no lo jugaste en su momento, contarte que en este Mafia: Definitive Edition no se reinventa la rueda en cuanto a mecánicas. Las dos principales tareas para el jugador son conducir de un punto A a otro B y acabar con los enemigos que se pongan a tiro. Aparte, hay extras como recoger coleccionables, pero son totalmente un añadido, nada que tenga peso en la historia. La conducción está en general bien resuelta, los coches son muy agradecidos de llevar, y salvo esos frustrantes momentos en los que los vehículos se quedan enganchados en buzones de correo o farolas, que deberían poder derribar fácilmente, lo demás está bien. Con los tiroteos, en cambio, ha sido más una relación de amor-odio.
El sistema de coberturas a lo Gears of War, para que nos entendamos, funciona, pero a nivel de apuntar y disparar me ha resultado complicado al avanzar en la historia. Eso sí, activando la asistencia de apuntado, la cosa cambia y las sensaciones en los tiroteos mejoran mucho.
El diablo en los detalles
Mafia: Definitive Edition, sin embargo, ha conseguido engacharme, cosa complicada teniendo en cuenta que Hades me atrapó hace poco y que cuento con muy poco tiempo para jugar. La clave, además de los visuales, que crean una cuidadísima atmósfera en combinación con el sublime apartado sonoro, ha sido la historia. Y es que menuda historia.
El viaje de Tom. Las motivaciones de Sam. El cachondeo de Paulie. Lo que esconde la cara de Frank. Don Salieri. Personajes que no olvidarás debido a su carisma y su personalidad y sus respectivos viajes. Sus voces en VOSE son increíbles (también hay pista en castellano si la prefieres), con unas actuaciones muy creíbles, en las que los silencios y las pausas tienen tanto peso como las palabras. No son solo muñecos digitales, sino que protagonizan una historia repleta de matices, de giros, de traiciones, que seguro que te calará hondo si, como yo, no disfrutaste del juego original. Si ya lo hiciste, seguro que todo esto ya te suena.
Un juego muy decente
Y es que Mafia: Definitive Edition está planteado como una película de mafiosos, en la que las secuencias cinemáticas nos hacen avanzar capítulos en la historia y la parte jugable transcurre en un mundo abierto, bastante desaprovechado por otra parte por la falta de misiones secundarias pero que brilla como marco para una de las historias más satisfactorias que he experimentado en un videojuego, una historia que podría usarse tal cual para una película. Si disfrutaste de cintas como El Padrino y de El Irlandés seguro que te encontrarás como en casa.
Mafia: Definitive Edition, a pesar del lavado de cara, no puede esconder que pertenece a otra época. A una época en la que las carencias técnicas se solventaban como se podía, y en la que al jugador todavía se le podía sorprender fácilmente. Pero sus grandes armas, un revisado aspecto visual, un argumento de película nivel Scorsese y una ambientación mágica, consiguen convertir a Mafia: Definitive Edition en un juego interesante incluso hoy en día. [80]
Yo tuve el primer Mafia para Xbox, pero apenas lo jugué un par de horas el día que lo probé y no sé por qué porque me encantó el rollo que llevaba. Luego, cuando vendí la Xbox y casi toda la colección de juegos (me quedé con unas pocas joyas retrocompatibles), estuve dudando si quedarme la máquina sólo por ese juego.
Tras esto me pasé años comentando aquí que se debería hacer un remaster/remake de ese juegazo porque merecía la pena. Al final mis deseos fueron escuchados y llegaron Mafia Edición Definitiva y Mafia Trilogy… así que me hice con los dos, jaja.
Ahora llevo largo tiempo en barbecho videojueguil por diversos motivos, pero cuando vuelva a jugar sin duda Mafia será de los primeros a los que meteré mano en cuanto acabe con los Resident.
La versión original fue de los primeros juegos que probé en PC, me encantó su historia, personajes, jugabilidad y lo aterrizado que era en términos de comportamientos, en ese sentido lo mejor era recargar y ver como las balas que no utilizabas se perdían o como a los enemigos también se les terminaba la munición.
La música es otro apartado genial, ese tema inicial aun lo tengo en mi cabeza a pesar de tantos años. No he podido jugar esta nueva versión, pero el hecho de que conserve esos elementos que lo hicieron interesante hace que me llame la atención, porque su idea nunca fue ser un GTA, sino contar una historia interesante