Una franquicia que supo ser referente para el estudio alemán Crytek durante varios años ahora busca ayudar a que la compañía recupere el rumbo. Crysis Remastered Trilogy nos permite revivir estos tres juegos, con un interesante lavado de cara, pero sin ajuste en algunas mecánicas.
Sintiendo la evolución
En el año 2007 tuvimos la llegada del primer Crysis, un juego que se presentó más como un portento técnico que una revolución a nivel de FPS. En 2011 llega una secuela que mejora en varios aspectos, enfocándose más en la narrativa y corrigiendo problemas. La tercera entrega llega un par de años más tarde.
Crysis Remastered Trilogy es esa oportunidad de sentir como el juego evoluciona, desde un FPS muy básico, dejando las decisiones de cómo realizar las misiones en manos del jugador. Hasta un juego que adiciona elementos de personalización, habilidades y mucho más sigilo.
El nanotraje es el protagonista durante las tres entregas y este también tiene su evolución, especialmente a nivel jugable, donde las mejoras lo convierten en lo que tuvo que ser desde el inicio, el arma más poderosa del protagonista.
Cambios notables
La premisa de Crysis Remastered Trilogy siempre fue un lavado de cara y creo que lo consigue. La primera entrega sobresale en cuanto a iluminación y detalle en exteriores, simulando un entorno selvático bastante colorido. No es lo más novedoso, pero se nota el esfuerzo.
De la segunda entrega me gustó mucho el tema de las texturas para los edificios. Recordemos que aquí salimos de la selva y llegamos a New York, donde los extraterrestres han invadido. Al ser entornos más cerrados los cambios también se notan mucho a nivel de iluminación y partículas, especialmente cuando tenemos explosiones.
En cuanto a la tercera entrega, me sorprendió que los interiores no lucen tan bien, sin embargo en exteriores luce fenomenal. La iluminación, los colores, los detalles. Queda más que claro lo que Crytek buscaba con esta remasterización, que es demostrar lo que su motor puede seguir haciendo.
Si nunca han tenido la oportunidad de jugar algún título de la serie, no se preocupen, las cinemáticas son la mejor muestra de cómo se veía antes y como se ve ahora. El cambio es muy evidente.
Con los errores de siempre
Tristemente Crysis Remastered Trilogy no corrige muchos de los problemas que presentaron estos títulos, en especial el primero. No me puedes hablar de revolución de los FPS, cuando el personaje se demora una eternidad en recoger munición, no se desliza o tiene movimientos supremamente toscos a la hora de arrojar granadas.
A esto se suma el tema de la inteligencia artificial, que lo sufren los tres títulos. Los enemigos pueden estar al lado y no atacan, pero también pueden estar a kilómetros de distancia y nos descubren.
Pero debo aclarar que a pesar de los fallos, son títulos muy entretenidos, en especial los dos últimos, donde hay más trama, personajes definidos y una jugabilidad más sólida.
Se le puede dar la oportunidad
A pesar de no ser juegos perfectos, siento que la remasterización les sienta bastante bien. Crytek siempre ha aprovechado sus títulos como una excusa para mostrar el potencial de su motor y a pesar de estar en horas bajas, saben que cuentan con un buen motor gráfico.
Cada una de las entregas que componen Crysis Remastered Trilogy son muestra de ello, por la verdad es que en cada una podemos destacar algo diferente e interesante. Además es una buena oportunidad para repasar estos títulos, que en su momento generaron bastante hype y que a pesar de sus problemas no dejan de ser entretenidos.
Precisamente estoy esperando que me lo traigan hoy, lo tenía reservado.
Tengo el primero en digital, y tuve el dos y el tres para Xbox 360, pero nunca me puse en serio a jugarlos más allá de la mera prueba habitual de turno de media/una hora. Esta es mi oportunidad y le tengo ganas especialmente al primero.
A mi el primero me dejó con muchas dudas, el segundo y el tercero son mas disfrutables
Lo decía porque el primero me parece más normal, o menos flipado con las locuras del nanotraje. Pero los probé hace tanto que poco recuerdo.