Cuando Epic Games decidió cambiar su modelo de negocio y alejarse de sus franquicias conocidas como Gears of War y Unreal Tournament, el nombre de Fortnite salió a luz. Un juego que tardaría mucho tiempo en tomar forma y que al final, alejado de su idea original, ha dado sus frutos.
El momento en que todo comenzó
Corría el año 2011 y Epic tenía un anuncio que realizar. El encargado de hacer los honores fue el célebre Cliff Bleszinski, quien ahora no forma parte de la compañía. Muy alejado a lo que nos tenía acostumbrado este equipo nos presentaron Fortnite. Un título de supervivencia, donde de día teníamos que recoger recursos para armar una fortaleza y en las noches debíamos atrincherarnos para sobrevivir a las oleadas de enemigos.
Lo primero que se me vino a la cabeza en su momento fue Minecraft, claro que con mejores graficas y no tan enfocado a esa libertad de construcción. Pero lo más sorprendente de todo fue el cambio de enfoque. Era más que claro que Epic Games quería salir de su zona de confort y ese nuevo juego era la oportunidad perfecta.
Un anuncio apresurado
Como suele ser costumbre cuando se presenta un nuevo juego, todos esperaban noticias y pronto, sin embargo, con Fortnite no fue el caso. El juego estuvo en silencio por mucho tiempo y de lo poco que se llegó a conocer en su momento era que estaba desarrollado con Unreal Engine 4 y que sería exclusivo para PC.
Pasaron varios años y con ellos varios sucesos, entre ellos, la compra de Gears of War por parte de Microsoft, sin embargo, las noticias de Fortnite seguían sin llegar y la incertidumbre respecto al título crecían, claro que a pesar de la falta de noticias nunca se habló de cancelación o algo parecido.
De vuelta al ruedo
Game Informer trajo de vuelta al juego en 2014 y con esto algo de información, donde destaca que el título seria free-to-play. Un giro más en la dirección de lo que Epic quería, dejando de lado las grandes producciones AAA, pero participando en mercados donde también se encontraban otros pesos pesados de la industria.
Este era el aspecto de Fortnite en el ya lejano 2014
De igual manera pudimos conocer de primera mano información acerca de los personajes, enemigos, construcciones, clases, es decir, todo lo que se había estado esperando del título por años llegaba de un momento a otro, aunque aún sin una fecha clara de lanzamiento y con la confirmación de que aún faltaba bastante camino por recorrer.
La luz al final del túnel
El 27 de Julio de 2017, casi 6 años después de su anuncio y después de muchos contratiempos, Fortnite llegaba “oficialmente” al mercado. Lo pongo entre comillas porque su llegada se da a través de acceso anticipado y solo se puede adquirir si uno es fundador, es decir, pagar una pequeña suma de dinero, la cual da derecho a beneficios, una vez el titulo se encuentre disponible, ahora si, oficialmente.
Lo más interesante de este lanzamiento fue que Fortnite llegó también para consolas (PS4 y Xbox One), mantuvo la promesa inicial de ser un título de supervivencia y su apartado estético tuvo un interesante cambio, presentándonos personajes con un estilo similar a los de pixar, además de un mundo más colorido.
PUBG y un nuevo giro de tuerca
Durante el proceso de desarrollo de Fortnite, muchas cosas sucedieron en el mundo de los videojuegos y uno de esos sucesos importantes tiene nombre y apellido PlayerUnknown’s Battlegrounds. En un principio uno no puede encontrar la relación entre estos dos nombres, hasta que el equipo de Epic decide meterse en el terreno y PUBG y buscar algo de su preciado botín, los jugadores.
Es así como en Septiembre de 2017 se anuncia la llegada del modo Battle Royale para Fortnite, disponible en Xbox One, PS4 y PC, dando un verdadero golpe sobre la mesa, ya que PUBG solo se encontraba disponible en PC y posteriormente dio el salto a Xbox, consola en la cual aún se encuentra en proceso de mejoramiento.
Ni el más optimista de los optimistas iba a pensar que este titulo le iba a robar parte del pastel al Battle Royale más famoso del momento y que este nuevo modo de juego se iba a convertir en el fenómeno que se que es actualmente.
La posible demanda de plagio por parte de Bluehole games, responsables de PUBG, unido a el hecho dicho modo de juego sería gratuito, no hizo más que aumentar la intriga y el hype de muchos jugadores que vieron, y aun ven, en Fortnite la posibilidad de conocer aquel tema del que todos están hablando.
De cabeza con el Battle Royale
El éxito de ese modo de juego fue rotundo, tanto así que Epic Games y People Can Fly, el otro estudio encargado de Fornite, tuvieron que redoblar esfuerzos para corregir, adaptar y mejorar todos los elementos que su Battle Royale estaba demandando. Es por eso que, hasta la fecha, todos los jueves tenemos nuevas actualizaciones del título, que van desde elementos estéticos, a mejoras de armamento, calidad gráfica e incluso modos de juego.
Estos estudios le ha metido tanto la ficha al tema, que hemos podido experimentar eventos como 50 vs 50, solo francotiradores, solo armas legendarias, luchas entre 5 equipos de 20 y demás modos de juego que le dan más vida al clásico 1 vs 99. Todo esto enmarcado en un mundo donde la base del juego original le añade elementos que PUBG no tiene.
Divertido y simple
Para mi el elemento más importante que tiene Fortnite es que es divertido y simple. Todos los jugadores comienzan con una pica y a medida que van explorando y acabando con otros enemigos, se pueden conseguir nuevas armas y materiales. Además estamos en un mundo donde casi todo es destruible y nuestra imaginación y habilidad de construcción, nos pueden dar una ventaja sumamente importante.
Hablando puntualmente de la construcción, es uno de sus elementos diferenciadores, pero también de los más importantes, no ganas una partida simplemente disparando bien, el construir se vuelve primordial y es una verdadera pasada cuando te das cuenta que gracias a la práctica eres más hábil al momento de montar estructuras y acabar a los enemigos con la ayuda de estas.
Free to play, pero no Pay to Win
El otro aspecto importante es que Fortnite no es un pay to win, todos los personajes van a encontrar las mismas armas y materiales, depende de su habilidad al momento de utilizarlos lo que les puede dar esa tan anhelada victoria magistral. El juego si cuenta con elementos de pago, pero estos son netamente estéticos y lo único que hacen es aportar algo más de color y diversidad a las batallas.
Puede ser frustrante al inicio cuando te enfrentas a muchos jugadores expertos, pero con el pasar de las partidas se va ganando más habilidad para ir enfrentando las diferentes situaciones que se presentan, además de implementar tácticas que nos permitan ser el único sobreviviente.
Adelantándose a la competencia
Así como en su momento Fortnite llegó primero a consolas que PUBG, en el terreno de los moviles también va a tomar ventaja, ya que fue anunciada la llegada del título a dichos dispositivos, inicialmente a dispositivos iOS y posteriormente a Android. Algo sumamente sorprendente, ya que hablamos de un juego con menos de un año en el mercado y que va a estar aterrizando prácticamente a todas las plataformas disponibles antes del mismo.
No es mi intención comparar a los dos exponentes del Battle Royale de la actualidad, de hecho no cuento con los argumentos para hacerlo, pero en Epic han hecho muy bien la tarea de analizar la competencia y adelantarse a sus pasos, aprovechando ademas la aceptación que su juego a tenido por parte de la comunidad.
Todos están invitados
Otro de los aspectos donde ha sabido destacar es en el tema de cross-play. Con la llegada a Android y iOS, los jugadores de todas la plataformas podrán jugar entre sí, excepto entre Xbox y Playstation, ya que ese tema aun no se resuelve, aunque el estudio norteamericano ha dejado claro que es posible.
No dudo que dentro de poco se esté anunciando la llegada de Fortnite a Nintendo Switch, cerrando un círculo que lo dejaría disponible en todas las plataformas del mercado y ganando muchísimo más terreno frente a la competencia.
Ya no es tan importante salvar al mundo
Toda la fama y gloria con la que cuenta el juego en este momento se resume en dos palabras, Battle Royale, dejando de lado su otro modo de juego, el que fue la base e idea original, aquel de la supervivencia y las hordas de enemigos. Tanto es así que el anuncio de la versión móvil del título habla de: el mapa, los 100 jugadores y demás elementos propios del todos contra todos, sin ningún tipo de rastro respecto al modo “Salvar el mundo”.
Incluso muchos de los usuarios fundadores han mostrado su preocupación respecto al hecho de que Fortnite puede terminar desechando dicho modo de juego, algo que no sería descabellado, teniendo en cuenta los beneficios que les ha traído y el esfuerzo que se encuentran realizando para mejorarlo.
Incluso otros juegos de la compañía se han visto afectados también, como es el caso de Paragon. Un MOBA que en su momento supo desplazar a Fortnite en cuanto a prioridades dentro del estudio, pero que al final fue cancelado por no dar los resultados esperados. No quiero decir de quien es la culpa, pero creo que algo tiene que ver.
Con una largo camino por delante
Sigo sorprendido por la manera como Epic logró posicionar de tan buena manera a un título que durante mucho tiempo se mantuvo en silencio y que además tuvo que pasar por varias modificaciones para dar en el clavo, agradar al público y hacerse un nombre en un territorio como el de los Battle Royale.
Por el momento la movida les ha dado resultado, pero deben continuar así, ya que la gloria es pasajera y los más seguro es que PUBG y la posible implementación de dicho modo de juego en Red Dead Redemption 2 puedan poner a tambalear lo que Fortnite ha conseguido hasta el momento.