PS VR, una realidad virtual muy recomendable

Recuerdo cuando era un chaval y no me perdía ni un sólo programa de El Rescate Del Talismán o Zona De Juego. Y ya no hablemos de lo que supuso ver El Cortador De Césped o Tron.


Por aquel entonces ya era un gran aficionado de los videojuegos y siempre soñaba con el día en el que pudiésemos estar dentro del juego, sentirse realmente el protagonista de ese mundo virtual.
 Desde hace algún tiempo ya se puede disfrutar de una realidad virtual en condiciones en PC, con Oculus Rift y HTC Vive, pero los usuarios de consola han tenido que esperar hasta este Octubre para disfrutar de un dispositivo que poco tiene que envidiar a sus hermanos mayores. Señores, la realidad virtual en consolas es un hecho. Ha entrado por la puerta grande y ha llegado para quedarse.

PS VR, realidad virtual en consolas

Lo primero que llama la atención de PlayStation VR (PS VR a partir de ahora) al tenerla en las manos, además de su elegante diseño, es su ligereza. Han conseguido un producto que no pesa prácticamente nada, gracias a la utilización de plástico para su cuerpo, y que ayuda a no tener ningún tipo de molestia tras varias horas de juego. En la parte trasera de su diadema disponemos de un botón que al pulsarlo y tirar hacia atrás nos permite retirar PS VR o bien ajustarla mejor en caso de que se haya movido. Es tan sencillo quitárselas que incluso puede hacerse con una sola mano.

El visor dispone también de un botón en su parte inferior derecha que nos permite ajustarlo moviéndolo hacia adelante o atrás. 
Es muy importante ajustar el visor correctamente hasta que veamos la imagen nítida ya que de lo contrario la experiencia se verá drásticamente afectada. 
No os preocupéis si utilizáis gafas ya que el dispositivo se ajusta perfectamente. De la diadema cuelga un cable con un pequeño mando de control que nos permitirá encender/apagar el dispositivo, subir y bajar el volumen y mutear el micro. 
Tranquilos, no molesta en absoluto mientras se está jugando.

En lo que se refiere a la calidad de imagen, que creo que a todos nos preocupaba mucho este aspecto, hay una diferencia más que notable respecto a Oculus/Vive pero también hay que tener en cuenta la limitación de Hardware, de las propias gafas y del que ejecuta el Software. 
En cualquier caso la calidad es más que suficiente para que no nos sintamos defraudados, más aún si no se han probado ninguna de las otras.

Los juegos

La inclusión de compatibilidad con gafas 3D en la anterior generación intentó impulsar una nueva forma de jugar pero, aunque hay algún caso en el que el 3D era muy bueno y existía cierta sensación de inmersión, era insuficiente para que se implantase como un estándar.

 Con PS VR la sensación de incertidumbre de los usuarios a través de las redes y de cómo sería posible aplicar esta tecnología a juegos AAA estaba a la orden del día. Bien, puedo afirmar que con probar un par de demos con PS VR se disipa cualquier tipo de duda al respecto.

PS VR se puede disfrutar perfectamente con juegos convencionales y además ofrece otras formas de disfrutar de los videojuegos, de vivir experiencias aunque no exista apenas interacción entre el usuario y el software. Me explico.
 En mi caso opté por estrenar PS VR con VR Worlds. Creo que es la mejor opción para la toma de contacto con el producto ya que sirve de ejemplo de los juegos o experiencias que nos podremos encontrar en el futuro. Lo primero que ejecuté es un contenido llamado Inmersión que transcurre dentro de una jaula que va descendiendo por el lecho marino. 
Arrecifes de coral, la más oscura profundidad marina y el ataque de un tiburón. 
No es un juego al uso si no una experiencia interactiva pero que consigue, desde el primer segundo, una sensación de inmersión absoluta. 
No existe opción de poder utilizar el mando (Dualshock o Move) y la única interacción que puedes realizar es mover la cabeza, incluso sacándola de la jaula, llegando a asustar incluso a algún pez incauto. 
Vuelvo a repetir, no es un juego, pero es el ejemplo perfecto de lo que podemos llegar a sentir con PS VR.

Mi segunda prueba fue con Danger Ball y mi satisfacción no hacía mas que crecer. 
Danger Ball es PONG llevado a la realidad virtual y puedo asegurar que es un auténtico vicio. 

La siguiente parada, más que obligada además, fue London Heist.
 En esta ocasión nos ponemos en la piel de un ladrón teniendo que robar un diamante y acabar con enemigos al más puro estilo Virtua Cop.

 VR Luge nos ofrece la posibilidad de realizar descensos a toda velocidad, tumbados sobre un patín, y realizando los giros con nuestra cabeza.
 Ha sido, para mí, la peor experiencia de todas ya que la posición horizontal del personaje le resta realismo al jugar en posición vertical. Odisea Scavenger es la última demo técnica integrada en VR Worlds y, si bien en mi caso fue bastante satisfactorio probarlo y me pareció entretenido, no es un juego apto para todos los públicos ya que requiere dedicarle tiempo para poder adaptarse a él y no sentir mareos.

En la PSN hay una buena cantidad de demos que también pude catar y que son la prueba irrefutable de que con PS VR se puede jugar a prácticamente cualquier juego. 
Títulos como EVE: Valkyrie, Until Dawn: Rush Of Blood, Driveclub VR o Thumper demuestran que se pueden hacer juegos de calidad para disfrutar de nuestro nuevo dispositivo.

El modo Cine

El modo cine de PS VR es, ni más ni menos, que utilizar las gafas para reproducir contenido tradicional.
En mi caso he aprovechado para revisionar la película de Final Fantasy XV y la experiencia ha sido impresionante. 
Con PS VR puestas tendremos la sensación de estar viendo nuestros juegos, películas, etc. en un cine.
 Puede parecer una opción absurda, pero jugar al FIFA, Modern Warfare Remastered o Mafia 3 de esta forma es muy gratificante.
 Además, si en tu casa sólo hay una tele y en ese momento no la puedes usar para jugar, siempre tienes la opción de enfundarte las PS VR y disfrutar de lo lindo.

¿Y los peros?

De momento todo parece un camino de rosas y, aunque sí que es cierto que el empaque de PSVR en términos generales es muy bueno, todavía existe margen de mejora. Por ejemplo, las almohadillas acaban dando muchísimo calor lo que se traduce en sudar mucho y, con el tiempo, desgastar el recubrimiento poco a poco. 
Además, aunque dispongamos de un headset inalámbrico es necesario tenerlo conectado a través de un cable al mando de control de PSVR. Esto se debe a que la gestión del audio la realiza la unidad procesadora que gestiona PSVR.
Es una molestia también la limitación de detección de la Playstation Camera ya que si la calibramos mientras estamos de pie y luego nos sentamos, tendremos que volver a recalibrarla para que nos detecte correctamente.
Dentro de este ámbito, si jugamos en una habitación muy iluminada puede no detectarnos correctamente o perder la conexión de fomra momentánea.
También me he encontrado con algún problema al jugar lejos de la cámara (unos 4 metros más o menos) o al darme la vuelta. Esto no es un problema de PSVR en si, soy consciente, pero hay que entender PSVR como el conjunto de todo lo que necesita para que funcione.

Conclusiones

Está claro que la realidad virtual no es apta para todos los públicos y que existe un período de adaptación para empezar a sacarle partido pero he de decir que, como Early Adopter de PS VR no podría estar más satisfecho con la compra. La buena cantidad de juegos y experiencias que ofrece de salida, así como el modo cine, son razones más que justificadas para recomendar su compra. 
Hay juegos para todos los gustos, unos con mejor acabado que otros, pero con todo lo que está por venir no hay que temer que ocurra como con Move o que exista un abandono total como con PS Vita. 
Eso sí, recomendaría que antes de desembolsar lo que cuesta el pack completo (PS VR, PlayStation Camera, Move y PS4 si no tienes una) intentes probarla en algún evento, centro comercial o en casa de algún amigo que las tenga.
 Si tienes alguna duda, puedes dejarla en los comentarios y te responderé gustosamente.


PD: Esto es el complemento ideal para PS VR 😀