Just Cause 2 no era, ni de broma, una revolución en el mundo de los videojuegos, ni siquiera conseguía destacar en el entre los sandbox por mucho gancho que tuvieran sus mecánicas, pero al menos sabía ser una experiencia entretenida y sólida. 5 años después y con más tecnología detrás Just Cause 3 parece patinar donde no lo hacía su precursor. (más…)
