Cuando cae en tus manos un juego indie que a primera vista tiene mecánicas fáciles, visualmente es diferente y que te atrapa para hacerte pasar horas intentando llegar más lejos, es que algo bueno tiene. Así es Summoner's Mess: te llamará por la vista y la "facilidad" pero te quedaras por el pique y el reto que supone. (más…)