En la segunda semana de julio se dio lugar en Málaga la V edición del festival de videojuegos Gamepolis, y como ya sucedió el año pasado, hemos asistido al evento para contaros nuestra experiencia.
Un viernes dedicado a viajar y probar
El evento empezó el viernes 14 por la mañana, pero no fue hasta la tarde cuando me dispuse a entrar al recinto. El festival se celebró en el Palacio de ferias y congresos de Málaga, algo alejado del centro de la ciudad. Una vez dentro, sentí una gran satisfacción, por fin estaba ahí, mi primera Gamepolis. Había diferentes zonas, pero todas ellas perfectamente organizadas. Muchísimas tiendas para comprar, un gran surtido de consolas para jugar, varios escenarios para ver los eSports y hasta un auditorio para ver las conferencias organizadas, no habían escatimado en gastos.
El gran reclamo de esta edición era la presencia de la fase final de la ESL Master de League of Legends, y allí que fui, a ver a los mejores equipos de España luchar por el trofeo. ¿Sabéis? Siempre veía este tipo de eventos desde mi monitor, y nunca imaginé el espectáculo que había desde el escenario. Se veía buen rollo entre las aficiones, y entre partidas te dabas una vuelta por el recinto, aunque yo opté por jugar a CS:GO y Quake.
Ese mismo día se estrenaba Splatoon 2, y la cola que había para jugar a una simple partida de tres minutos era kilométrica. Pero bueno, en todo lo malo hay algo bueno, y eso se traducía en menos colas para probar la Realidad Virtual u otros títulos, como Destiny 2. En definitiva, un viernes de viajar y probar todo lo que podía ofrecer Gamepolis.
Un sábado lleno de actividades
Hoy sí, esta vez si pude llegar temprano, aunque eso no evitó que hubiese una cola tan larga que rodeaba medio recinto. Por suerte pude entrar sin esperar, y eso me permitió poder probar la Realidad Virtual, porque fue lo más solicitado de todo el evento. Después de la experiencia VR me fui directo a un stand de PlayerUnknown’s Battlegrounds, donde un grupo de organizadores te ponían en ambiente. Jugué una partida con un buen amigo, y aunque morí al principio, la experiencia fue muy divertida.
Después de jugar nos encontramos con unas amigas que venían de Córdoba, ya estábamos todos juntos para liarla, vaya si lo hicimos. Directamente, como un rayo, nos dirigimos al stand de Just Dance y nos pusimos a bailar. Al principio había vergüenza por la gran cantidad de gente que había mirando, pero una vez bailada la primera canción la vergüenza pasó, y solo queríamos bailar más, más y cada vez más. Una vez terminó nuestro ridículo, nos dirigimos al escenario central, donde siempre había un DJ poniendo música. Ese escenario daría mucho juego a lo largo de la tarde.
Una vez visto y revisto todas las zonas de Gamepolis, me dispuse a ir a la zona Indie, donde pude probar juegos bastante divertidos. Además, pude charlar con varios desarrolladores, que me explicaron la dificultad de crear un videojuego sin presupuesto, donde solo valía el apoyo del equipo y la dedicación de cada uno. Para la tarde se estaba organizando un concierto de Kronno Zomber, un rapero muy popular en YouTube, y la verdad… tenía ganas de acudir, pero había que matar el tiempo, y no se me ocurrió mejor idea que acudir a varias conferencias. No me extenderé mucho, pero una de las que más interés generó fue la de los nuevos lanzamientos de la editorial Héroes de Papel, aunque unos minutos después el auditorio se volvió a llenar para escuchar a Anouc, Eider y Keireth hablar sobre los eSports y la pasión convertida profesión.
El momento llegó, el escenario se llenó, Kronno Zomber junto a Punyaso aparecía en el escenario, aunque con bastante retraso. La gente agolpaba alrededor, y los que no, se ponían a bailar Break Dance al lado mientras la música sonaba. ¿Podía estar organizado mejor? Sí, pero eso no quita que fue un momento memorable. Los más suertudos pudieron coger algún que otro disco, e incluso hasta un libro. El momento era eufórico. Se hacía tarde, teníamos que despedirnos de nuestras queridas amigas cordobesas, y nosotros, con algo de tristeza, nos volvimos al hotel, donde curiosamente se alojaban varios equipos de eSports, como Movistar Raiders. Lo que sucedió aquella noche… prefiero censurarlo.
La brocha a un evento casi perfecto
Último día del evento, me desperté tarde, apenas había dormido, pero eso no me quitaría las ganas de acudir al cierre de uno de los mejores eventos en el que he estado. Poco más se podía hacer que jugar y ver la final de la ESL Master de League of Legends, donde Giants se proclamó campeón. El ambiente había crecido, había más gente y el fanatismo era mayor.
La mayor parte de la tarde me la pasé haciéndome fotos con celebridades del mundo de los eSports y Youtube; y bueno, alguna que otra compra también. Mientras tanto teníamos las conferencias, donde todas eran muy buenas, pero la que más me llamó la atención fue “Mujeres en los videojuegos: su situación a debate”. Se habló sobre la igualdad hoy en día, pero que en cambio había mucha desigualdad en el sector, tanto a nivel profesional como de consumo.
Justo al final, cuando ya disponía a irme para coger el autobús, me entero de que Arkano está allí, en el escenario, y que encima iba a ofrecer un concierto. Me frotaba los ojos, y quizás algunos no lo entendáis, pero es uno de mis ídolos, pero no por lo que hace, sino por cómo ha luchado para conseguirlo. Fue un momento inolvidable. Por desgracia ya me tenía que despedir este maravilloso fin de semana, y solo me toca contar los días para la próxima edición.