Uno de los juegos más importantes en el género de Mundo Abierto, The Witcher 3, ha sufrido un importantísimo lavado de cara que, encima y para alegría del personal, es gratuito. Gracias a un parche sin PVP de CD Projekt RED, The Witcher 3 vuelve a tener una pinta espectacular.
Dependiendo del estilo artístico de un videojuego, y de los progresos que se hacen en ese género a lo largo de las generaciones, es complicado que el título envejezca bien y que sea capaz de conservar intactas las cartas de presentación que han provocado un impacto determinado en un momento concreto.
Una nueva oportunidad
Yo mismo no jugué The Witcher 3 en su momento, y al intentarlo tiempo después de su lanzamiento los argumentos visuales me parecían de menos fuerza. Su propuesta jugable, con muchas opciones y posibilidades, se me hizo bola, pero al no entrarme fuerte por los ojos la cosa se quedó ahí. Yo siempre he sido muy de Skyrim, con una fórmula mucho más directa, así que tampoco noté la falta de un título potente en el género.
Ahora, años después, y gracias al gratuito parche Next-b que ya está disponible para PC, Xbox Series y PS5, donde lo estoy jugando, The Witcher 3 vuelve a reivindicarse. Este lavado de cara, que para mi tiene casi el efecto de un remake, le ha sentado de maravilla y deja sin excusas a les que lo esquivamos en su momento. Sus revisados visuales y sus 60 FPS en su Modo Rendimiento (sacrificando el Ray Tracing), eso sí, han sido argumentos inapelables para mi. Hasta es posible que tiente a más de une que ya le haya metido decenas de horas.
Al menos lo tienes que probar.