What the Fuck?! [Encuentros en la Tercera Fase]

Me despierto de golpe, como si me hubieran atravesado la cabeza con un jodido taladro. Giro la cabeza y veo que estoy en la puerta de un jodido hospital. Me duele todo el puto cuerpo y no recuerdo una jodida mierda. Pero lo jodido del caso es que tengo la sensación de que hay algo importante de lo que debería acordarme. Y no puedo. Joder. ¿Pero quién coño se despierta de pie? ¿Desde cuándo soy un puto sonámbulo?




Me vibra el bolsillo. Saco un móvil y un tio que parece empastillado me dice que trinque un coche y acuda cagando hostias a Broadway con la 79, que tiene un trabajito para mi pero que quiere decírmelo en persona. Trincar un coche. Un trabajito. De puta madre, soy un jodido camello. Mi madre seguro que está orgullosísima de mi.

Me alejo un par de manzanas del hospital y me meto en el primer callejón lo suficientemente estrecho como para no estar concurrido y lo suficientemente ancho para que algún tipo listo lo utilice como párking gratis. Voilà, un viejo Ford. Una añeja preciosidad… Que está al lado de un Honda que tiene más caballos que anillos Phil Jackson. Elijo el japonés – que le jodan al viejo Henry -, peto el cristal, hago un puente – mi cabeza estará jodida, pero mis manos tienen el piloto automático – y salgo cagando hostias de allí, no sea que me cruce con el propietario de las ruedas amarillas.

Lo bueno de Manhattan es que no hace falta un GPS para recorrer las calles. Es un jodido tablero de ajedrez, con perfectas casillas cuadriculadas. Me planto en la dirección señalada en apenas 20 minutos, avanzo un par de calles más, abandono el Honda y me dirijo al piso del tio del móvil. Fácil. Lo difícil es saber porqué sigo las indicaciones de un tio que no recuerdo en absoluto.

Lo que me imaginaba, Brucie, que así se hace llamar el amigo, está completamente chalado. No para de gritarme que es el tio más sexy del mundo, que está hiper cuadrado, que se mete de todo y que no para de follarse todos los agujeros que le apetecen. Al escucharle durante unos minutos tengo la sensación de que una loca, que me va a intentar dar por culo, pero al rato me doy cuenta que es más bien un zumbado, tan a petar de testosterona que se follaría hasta a un espejo si éste tuviera un agujero. Y que sí, que me dará por culo, pero al menos no literalmente.

La parte en la que le presto más atención es en la que me cuenta que tiene una maleta que hay que entregar a unos amigos suyos al cabo de un par de días. No me gusta la forma en la que pronuncia «maleta» y «amigos», así que deduzco que me está pidiendo que le lleve coca o algo parecido a unos camellos con los que no tiene mucha confianza. Como he salido sin blanca del hospital le digo que sí, cojo la maleta y me doy el piro.


Con la pasta que Brucie me ha adelantado me busco una habitación en un motel cercano. Una habitación sencilla, cama, televisión por cable y lavabo. Nada escandaloso, total, tampoco sabría qué hacer con un jacuzzi. Es raro, porque no recuerdo la última vez que dormí, pero no tengo sueño. Aunque claro, no recuerdo una jodida mierda. Enchufo la televisión… Y ahí es cuando empiezo a recordar. O algo así.

De repente siento que es importante que mire la televisión durante mucho rato. Sin cambiar de canal. Mucho rato. Al principio me pregunto si Brucie no me habrá contagiado alguna enfermedad chunga, o que simplemente me haya dado recientemente un golpe en la cabeza que me haya dejado lelo. Eso explicaría lo del hospital. Pero al cabo de un rato hora me doy cuenta de algo. Me entra un jodido cuelgue. Los jodidos programas se repiten. Todo el rato. La televisión es un puto fake. Se me erizan todos los putos pelos del cuerpo.

Cambio de canal. Pasa lo mismo. Algo no cuadra. Más bien nada cuadra. De repente, otro flashback, un dejavu o como coño se diga: Tengo la necesidad de mirar por la ventana. Me asomo y empiezo a fijarme en la gente que pasa. Gente y más gente. Y más gente. Cada uno ensimismado en sus cosas, en sus mierdas, en sus conversas por el móvil… Y al cabo de un rato me doy cuenta. Coño, la mitad de esa jodida gente dice lo mismo. Mierda, todos tienen la misma jodida cara. Coño. Joder. Hostia puta.

Y entonces lo recuerdo, como si alguien me lo revelara a gritos. Aquel soplón de mierda. Aquel tiroteo. El dolor. La luz cegadora. Y después nada. Al menos hasta el hospital. Mierda. Debería estar muerto. O igual ya lo estoy. La puta tele no debería ser un bucle. La gente de la calle no es real. Mierda. Me entran escalofríos muy jodidos. Estoy helado. Me tiemblan hasta las orejas. Joder, estoy acojonado. Y lo que más me acojona es que mi mano está a su puta bola buscando algo, que resulta ser la pipa de Brucie. Mi cuerpo quiere que me pegue un tiro. Y lo jodido del asunto es que no me parece tan mala idea.


Me introduzco el cañón en la boca. Y paro de temblar. Joder, mi cuerpo está disfrutando, ha alquilado la jodida silla de Jack Nicholson para disfrutar en primera fila del espectáculo. Durante un instante se me ocurre que igual se me está yendo la pinza muchísimo, que soy un drogata con mono y que estoy alucinando. Pero ni aún así dejo de tener la sensación de que estoy haciendo lo correcto, de que estoy llegando a algún lado, de que tengo que hacer lo que tengo que hacer. Y apreto el gatillo. Curiosamente, el bang suena mucho después. Una eternidad después. Justo antes de apagarse la luz.

Me despierto de golpe, como si me hubieran taladrado la cabeza con un jodido taladro. Giro la cabeza y veo que estoy en la puerta de un jodido hospital. Me duele todo el puto cuerpo y no recuerdo una jodida mierda. Y encima ahora me vibra el jodido bolsillo. Seguro que es una zorra pidiéndome pasta.

  1. Bastante bueno xD Has captado muy bien el punto de vista del señor nico. La verdad, es que lo de la tele asusta.
    Pero peor sería ponerte a pensar en que vas a por un perrito, intentas pedirlo pero en vez de eso sin saber por qué le atizas un puñetazo. Y a partir de ahí todo cuesta abajo hasta terminar en el hospital o en comisaría…. Y todo por un perrito

  2. No esta mal, pero creo que has abusado un poco del insulto facil, una cosa es intentar usar un lenguaje vulgar y otro es poner de cada 2 palabras 3 insultos. Pero en general me ha gustado, eso si, he acabado ralladisimo xD

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