He de confesarlo, de pequeño, era un enamorado de Warhammer Fantasy, disfrutando como un loco de sus batallas, de ser ese poderoso general Orko, del Imperio o Conde Vampiro dispuesto a aniquilar a mi adversario y es por eso por lo que esperaba, con frenesí, Total War: Warhammer desde el mismo momento que supe de su existencia. (más…)
